Jueves 28 Marzo 2013

Sixto Rebolledo está ligado al beisbol desde los siete años de edad; reconoce que cuando se retire extrañará mucho el campo de juego

Redacción

Udla 1Toda una vida apegada al beisbol y 27 años como el manager del equipo de la Universidad de las Américas Puebla, Sixto Rebolledo ve aún lejano el retiro del deporte que practica desde los 7 años en su natal Cosamaloapan, Veracruz. “Aquí conocí mucha gente buena, rectores, directores de deportes y directivos. Estoy muy agradecido con la Udlap, porque es mi vida. Sé que cuando me vaya extrañaré mucho mi campo de juego”. Admirador profundo de Mickey Mantle, Sixto Rebolledo inició su carrera en 1960 cuando firmó para jugar en Fresnillo, Zacatecas durante 3 años. Cumplido este período hizo prácticas con Poza Rica, aunque lo que la franquicia veracruzana le ofrecía no cumplía con sus expectativas “Me vine a vivir a Puebla en 1964, aquí me establecí, me casé y tuve hijos hasta que en 1980 me hablaron de Los Pericos para integrarme a su staff de coacheo. Al siguiente año me nombraron coach de primera base y pitcheo para ser campeones ese año y el siguiente”, recordó el manager Azteca. Para 1985 se trasladó a Tlaxcala y tras un año de estancia lo llamaron para ser el nuevo manager de los Aztecas de la Udlap, donde fue campeón de la Conadeip en 1993 y subcampeón en 2008 y 2009. Consiguió títulos en ligas de Puebla, universitarias y subcampeón en torneos organizados por Pericos. Entre sus mejores momentos está el triunfo ante la misma franquicia 5 carreras a 4 hace cuatro años. Aunque su máximo logro es que sus peloteros como Alejandro Donadiu, Erik Meneses y Jaime Guzman se han vuelto profesionales “en 1996 me firmaron a 7 jugadores, que incluso no eran para la Liga Mexicana, si no para grandes ligas pero ellos nunca quisieron irse por sus estudios”. Sobre el beisbol, Sixto Rebolledo señaló que es el más difícil de todos los deportes, debido a que un pelotero debe tener mucha técnica para fildear, tirar exacto, batear, correr y lanzar. “La posición más matada es el cátcher, porque siempre tiene que estar agachado para recibir tiros de 90 o 100 millas. Lo más difícil es el bateo, porque estas en desventaja de 9 hombres contra 1. Lo bonito es que te dejan trabajar con el 30%, es decir que sí una persona de 10 lanzamientos acierta 3 es muy bueno”. Dueño de un extenso conocimiento en reglas, técnicas, historias, señales y secretos como los cuatro outs en una entrada, el triple play sin que alguien agarre la bola y la carrera producida después del tercer out; Sixto Rebolledo comparte sus enseñanzas con los jóvenes que pisan el Diamante Azteca. “Hablo de beisbol, desayuno beisbol, como beisbol y sueño beisbol. La gente que no conoce mucho le gustan los batazos, pero el juego fino es cuando no hay muchos hits, un juego sin carreras no se da todos los días y un juego perfecto casi nunca. Lanzar en la octava entrada sin imparables y que en la novena te conecten una línea te derrumbas. A mí me pasó dos veces”. El beisbol es el rey de los deportes, porque es un fiel reflejo de la vida: “Se tienen 9 entradas y hasta extra innings; se juega en diversas posiciones con distintas tareas y por más puntos que sea la ventaja o se vaya perdiendo un batazo cambia la historia del partido”, finalizó.