Alina FERNÁNDEZEn riesgo de desaparecer la lengua yumhu, Ixtenco.- Este municipio es el último pueblo del bastión otomí, y se encuentra en peligro de perder este dialecto, sino se enseña en la región a las nuevas generaciones, así lo dio a conocer el cronista de este lugar Agustín Ranchero Aguilar. De esta manera indicó que en la actualidad sólo trescientas personas oriundas de este lugar aún lo conservan y lo hablan muy bien, por lo regular personas de la tercera edad, que como no tienen con quien practicarlo muchas ocasiones se guardan el conocimiento y no lo comparten. Sin embargo preciso que se impartirá de manera constante en las nuevas generaciones, para lograr que no se pierda esta lengua materna. Se enseña en cuatro escuelas; en dos jardines de niños y dos primarias del municipio como una materia obligatoria, además en verano se abre el curso de otomí en el centro cultural, que también está a disposición del público en general. Sí te interesa aprender este dialecto puedes asistir y colaborar en la labor del rescate de nuestras lenguas. Asimismo dijo que sí hay respuesta por parte de los infantes en aprender esta lengua que se puede decir que aún no ha muerto al cien por ciento. Explicó que se pensó en los menores por su rápida capacidad de aprendizaje, a los infantes se les estimula para que aprendan de una manera fácil la lengua materna mediante cantos, danza, poesía, gastronomía, fauna y la naturaleza que los rodea, se les enseña cómo decir todos los elementos que están en su entorno en su vida cotidiana. De esta manera no se les hace difícil el aprender este dialecto a la par del español pues a esta edad son como esponjas, resaltó. Lamentó que se imparta el otomí en las escuelas sólo una hora a la semana, esto quiere decir que van aprender poco a poco, por lo que sí se dedicará una hora diaria en las escuelas para su enseñanza. En un aproximado de veinticinco años ya se hubiera recuperado la lengua materna al menos un ochenta por ciento. Factores como los modismos y el excesivo contacto con la televisión hacen que el lenguaje se desvirtue, pues los pequeños imitan todo lo que escuchan. Dijo que Ixtenco es el único municipio del estado de Tlaxcala de descendencia otomí y que conserva la lengua junto con otros dos municipios de toda la república mexicana por lo que es un honor, al último dijo que a la lengua se le llama yumhu. Es importante que como padres de familia les hablemos a nuestros hijos de nuestras raíces y de la importancia de conservar la lengua materna pues es parte de nuestra identidad.