Viernes 25 de Octubre de 2013 |
| Dudas en el PAN Ramón Zurita Sahagún Por vez primera, el Partido Acción Nacional abre a toda su militancia la elección de su dirigente nacional. Desde su fundación en el lejano 1939, los panistas mantenían cerrado el procedimiento de selección de sus dirigentes, el que correspondía a un reducido grupo de consejeros. Los militantes y dirigentes panistas, especialmente los segundos, mantuvieron herméticos los diversos mecanismos usados tanto para la elección de sus dirigentes como de los propios consejeros que realizaban dicho procedimiento. Fueron muchos los años en que los panistas se mantuvieron celosos de su partido, sin aceptar a personajes provenientes de otros partidos, hasta la irrupción de los llamados “Bárbaros del Norte” ocurrida en la década de los 80 y que desencadenó la candidatura presidencial de Manuel de Jesús Clouthier en 1988. Producto de ello fue el triunfo alcanzado doce años más tarde, cuando Vicente Fox surgido de esa misma corriente de la década de los 80 se convirtió en el primer Presidente de México emanado de un partido ajeno al PRI. Ya para entonces el PAN contaba con miles de afiliados y se convirtió en un partido semejante a los otros, con la aceptación de exmilitantes de otros partidos que buscaban solamente un vehículo para acceder a los cargos de elección popular. Los panistas se convirtieron en una opción como las otras, alejados de ese halo de pureza que siempre pregonaron. Acción Nacional perdió la Presidencia de la República después de doce años y fue relegado hasta el tercer lugar en las preferencias electorales. Ahora en el PAN se prepara la elección de su dirigencia nacional, en medio de un enfrentamiento frontal entre los herederos del sexenio pasado y la actual dirigencia del partido. Gustavo E. Madero Muñoz, actual presidente del CEN de ese partido, y Ernesto Cordero Arroyo, exsecretario de Hacienda y excoordinador de la fracción senatorial del partido, son, hasta el momento, las dos figuras más mencionadas para disputar dicha elección. Sin embargo, los panistas buscan una tercera vía, mediante la candidatura de un personaje que pueda aglutinar a la militancia y evitar rompimiento, divisionismo o fracturas. Luis Felipe Bravo Mena, ex presidente del partido, se ofreció como esa alternativa, pero pronto fue desechada su propuesta. Ahora lo hace Josefina Vázquez Mota, la ex candidata presidencial, la que levanta la mano y, apoyada por varios ex gobernadores, se presenta como nueva opción. El problema es que Josefina provocó muchos enconos, luego de su derrota electoral. La situación del panismo es sumamente preocupante, ya que muchos militantes consideran que el partido está actuando con un total entreguismo al gobierno federal, por lo que consideran que es momento de cortarle las alas a su actual presidente, evitando su reelección, mientras que otros consideran que detrás del grupo del senador Cordero Arroyo se encuentra toda la maquinaria del gobierno anterior. Sin embargo, no advierten al personaje que pueda contender y ganarle en la elección abierta a quienes actualmente se ven con posibilidades de ocasionar un choque frontal. Hay quienes pretenden convencer a Diego Fernández de Cevallos para que compita, con grandes posibilidades de éxito, pero el llamado “Jefe” se muestra renuente a ello y prefiere abstenerse. Email: ramonzurita44@hotmail.com Email: zurita_sahagun@hotmail.com |