De 40 invidentes que tomaron un curso, sólo uno logró obtener empleo; las calles del municipio no cuentas con espacios adecuados para este sector Maritza HERNÁNDEZ Corresponsal  San Martín Texmelucan.- A pesar de los esfuerzos de algunas asociaciones civiles y autoridades para colocar a personas con capacidades diferentes en el campo laboral, son mínimas las empresas que brindan esta oportunidad así lo dio a conocer la regidora de Grupos Vulnerables, Verónica Robles. “Hemos ayudado con asistencia médica y con alimentación, pero en cuestión de trabajo son pocas la empresas que los contratan, pero después de un determinado tiempo son despedidos”, declaró. Indicó que cuentan con un padrón de poco más de 70 personas, tanto en la cabecera como en las 11 juntas auxiliares que presentan algún tipo de discapacidad, “quienes son víctimas de discriminación a la hora de solicitar un empleo, pues en muchas ocasiones los empresarios creen de manera errónea que no realizarán el trabajo”, explicó. Dijo que entre las discapacidades más frecuentes en el municipio, se encuentran las intelectuales, auditivas y visuales, así como algunas personas a las que les falta alguna extremidad. En este mismo sentido, Pedro Coraza Matías, director de la Casa de Asistencia y Desarrollo Integral para Personas con Ceguera (CADIP) declaró que en el municipio, la debilidad visual ha crecido por lo menos 10 por ciento, ya que de cada siete personas con discapacidad, dos son ciegas. Coincidió con la regidora en cuanto a la negativa de las empresas para contratarlos, por lo que dijo, muchas de las personas con ceguera optan por el autoempleo y prefieren vender dulces o botanas. Sin embargo, ante la presencia de personas que se hacen pasar por ciegos, la población desconfía y no compra la mercancía, lo que da como resultado que estas personas prefieran pedir limosna. Mencionó que de 40 personas que participaron en terapias y que egresaron de un curso de computación durante el año pasado, sólo una se desempeña en una institución educativa, sin embargo, es víctima de discriminación por parte de los alumnos. Por otra parte, refirió que el municipio no cuenta con la estructura urbana adecuada para las personas con discapacidades ya que sólo algunas banquetas cuentas con rampas para discapacitados y los puentes peatonales carecen de ellas. Dijo también que los semáforos deberían ser sonoros, pero el municipio no cuenta con esta infraestructura, lo que dificulta el tránsito de las personas con ceguera. Coraza Matías hizo un llamado a las autoridades municipales para que los apoyen insertándolos en el campo laboral o a través de convenios con empresas. Agregó que es necesario que adapten calles y semáforos, con la finalidad de propiciar una mejor calidad de vida a las personas discapacitadas. |
San Martín Texmelucan.- A pesar de los esfuerzos de algunas asociaciones civiles y autoridades para colocar a personas con capacidades diferentes en el campo laboral, son mínimas las empresas que brindan esta oportunidad así lo dio a conocer la regidora de Grupos Vulnerables, Verónica Robles. “Hemos ayudado con asistencia médica y con alimentación, pero en cuestión de trabajo son pocas la empresas que los contratan, pero después de un determinado tiempo son despedidos”, declaró. Indicó que cuentan con un padrón de poco más de 70 personas, tanto en la cabecera como en las 11 juntas auxiliares que presentan algún tipo de discapacidad, “quienes son víctimas de discriminación a la hora de solicitar un empleo, pues en muchas ocasiones los empresarios creen de manera errónea que no realizarán el trabajo”, explicó. Dijo que entre las discapacidades más frecuentes en el municipio, se encuentran las intelectuales, auditivas y visuales, así como algunas personas a las que les falta alguna extremidad. En este mismo sentido, Pedro Coraza Matías, director de la Casa de Asistencia y Desarrollo Integral para Personas con Ceguera (CADIP) declaró que en el municipio, la debilidad visual ha crecido por lo menos 10 por ciento, ya que de cada siete personas con discapacidad, dos son ciegas. Coincidió con la regidora en cuanto a la negativa de las empresas para contratarlos, por lo que dijo, muchas de las personas con ceguera optan por el autoempleo y prefieren vender dulces o botanas. Sin embargo, ante la presencia de personas que se hacen pasar por ciegos, la población desconfía y no compra la mercancía, lo que da como resultado que estas personas prefieran pedir limosna. Mencionó que de 40 personas que participaron en terapias y que egresaron de un curso de computación durante el año pasado, sólo una se desempeña en una institución educativa, sin embargo, es víctima de discriminación por parte de los alumnos. Por otra parte, refirió que el municipio no cuenta con la estructura urbana adecuada para las personas con discapacidades ya que sólo algunas banquetas cuentas con rampas para discapacitados y los puentes peatonales carecen de ellas. Dijo también que los semáforos deberían ser sonoros, pero el municipio no cuenta con esta infraestructura, lo que dificulta el tránsito de las personas con ceguera. Coraza Matías hizo un llamado a las autoridades municipales para que los apoyen insertándolos en el campo laboral o a través de convenios con empresas. Agregó que es necesario que adapten calles y semáforos, con la finalidad de propiciar una mejor calidad de vida a las personas discapacitadas.