**En un recorrido de este medio por la calle 10 Poniente, vendedores exhiben equipos de comunicación de procedencia ilícita; obtienen ventas de hasta 5 mil pesos Miguel HERNÁNDEZ  EN TOTAL impunidad, vendedores de teléfonos celulares y radios Nextel robados ofrecen estos equipos a plena luz del día en la 10 Poniente, pese a la presencia policiaca. Entre 2 mil y 5 mil pesos es la ganancia de las ventas sin factura. Al transitar por esta calle, comerciantes ambulantes, entre comida y enseres, ofrecen sus productos; entre ellos, los que venden teléfonos, desde equipos iPhone hasta Blackberry, que se entregan sin caja ni cables, mucho menos, garantía. Quienes venden estos equipos se colocan en la banqueta de esa calle, donde exhiben en una mesa los aparatos envueltos en plástico, aunque haya patrullaje e, incluso, policías se acercan a preguntar por los costos. Antes, este tipo de mercancía robada era vendida sobre la 8 Poniente entre la 9 y 11 Norte; ahora se ha expandido hacia la zona más céntrica, casi con la 5 de Mayo. Entre dos y tres personas cuidan los aparatos, ante la demanda de las personas que se acercan para conocer los precios. De la 5 de Mayo hasta la 5 Norte, es donde por lo común ronda este tipo de vendedores de teléfonos, a quienes las personas preguntan si dan garantía y cuya respuesta es que “por ser de oferta, no podemos darla”. Los comerciantes ofrecen equipos varios, desde los que cuestan 200 pesos hasta los que rondan en 5 mil. Sin embargo, no permiten probarlos antes de la compra, pues no incluyen cargador. Además si algún modelo no está en “existencia”, ofrecen conseguirlo en algunos días, con el argumento de no exhibir todos porque “son muchos” y como los venden en la calle “no hay espacio”. En el lugar no hay presencia de inspectores de normatividad, pues sólo se encargan de hacer rondines en la calle 5 de Mayo, donde impiden la presencia de ambulantes. |
EN TOTAL impunidad, vendedores de teléfonos celulares y radios Nextel robados ofrecen estos equipos a plena luz del día en la 10 Poniente, pese a la presencia policiaca. Entre 2 mil y 5 mil pesos es la ganancia de las ventas sin factura. Al transitar por esta calle, comerciantes ambulantes, entre comida y enseres, ofrecen sus productos; entre ellos, los que venden teléfonos, desde equipos iPhone hasta Blackberry, que se entregan sin caja ni cables, mucho menos, garantía. Quienes venden estos equipos se colocan en la banqueta de esa calle, donde exhiben en una mesa los aparatos envueltos en plástico, aunque haya patrullaje e, incluso, policías se acercan a preguntar por los costos. Antes, este tipo de mercancía robada era vendida sobre la 8 Poniente entre la 9 y 11 Norte; ahora se ha expandido hacia la zona más céntrica, casi con la 5 de Mayo. Entre dos y tres personas cuidan los aparatos, ante la demanda de las personas que se acercan para conocer los precios. De la 5 de Mayo hasta la 5 Norte, es donde por lo común ronda este tipo de vendedores de teléfonos, a quienes las personas preguntan si dan garantía y cuya respuesta es que “por ser de oferta, no podemos darla”. Los comerciantes ofrecen equipos varios, desde los que cuestan 200 pesos hasta los que rondan en 5 mil. Sin embargo, no permiten probarlos antes de la compra, pues no incluyen cargador. Además si algún modelo no está en “existencia”, ofrecen conseguirlo en algunos días, con el argumento de no exhibir todos porque “son muchos” y como los venden en la calle “no hay espacio”. En el lugar no hay presencia de inspectores de normatividad, pues sólo se encargan de hacer rondines en la calle 5 de Mayo, donde impiden la presencia de ambulantes.