** Miles de fieles creyentes asistieron a la tradicional procesión del Viernes Santo en el Centro Histórico Ángello WOLF  MILES DE católicos en Puebla participaron en el tradicional Viacrucis que este 2013 encabezó el arzobispo Víctor Sánchez Espinosa al interior de Catedral. La fe y el fervor católico quedó plasmado durante el recorrido que realizaron por las principales calles del Centro Histórico. Diversas familias acompañaron las imágenes de la Virgen de la Soledad, de Jesús de Analco, la Virgen de los Dolores, Jesús Nazareno y el Señor de las Maravillas del Templo de Santa Mónica, que representa una de las caídas de Jesús. Niños con sus papás y personas adultas, vestidos ligeramente para soportar el calor, al igual que turistas no dejaban de tomar fotos, formaron parte de los contingentes. Desde temprano, para facilitar a los católicos poblanos su participación en la actividad religiosa, autoridades de Tránsito y Policía Municipal implementaron un dispositivo de seguridad para la procesión del Viernes Santo. La circulación vehicular la 18 Poniente- Oriente, de la 2 Norte, sobre la 16 de Septiembre, desde la 27 Poniente hasta el Zócalo, fue cerrada. Luego de que el arzobispo Sánchez Espinosa recorrió el llamado Camino de la Cruz, haciendo referencia a los pasajes que vivió Jesucristo desde que fue aprehendido hasta su crucifixión y sepultura, hizo un llamado a la reflexión sobre el significado del sacrificio, antes de dar paso a la llamada procesión del silencio, donde resaltó la necesidad de que prevalezca el amor entre los seres humanos. “Jesús que también supo lo que es el sufrimiento, nos demuestra que sí es posible seguir amando aún en medio de la adversidad”, expresó al invitar a fieles católicos a recordar el sacrificio de Jesucristo, dando paso así a la salida de la Cruz Guía, seguida por un grupo de tamborileros y atrás la imagen de la Virgen de la Soledad, cargada por decenas de devotos. De esta forma comenzó el recorrido en el que le acompañaron miles de fieles. Se estima que fueron poco más de 124 mil las personas que participaron en dicha procesión, luego del medio día, que salió desde el atrio de la Catedral y que recorrió calles del centro histórico hasta regresar al punto de partida. Luego de atravesar la avenida Reforma, hasta llegar a la 16 de Septiembre, para entrar de nuevo a Catedral, se efectuó la tercera y última reflexión, recordando la muerte de Jesucristo. Mucho llamo la atención que fue la imagen del Señor de las Maravillas, la que más fieles siguieron, lo cual preguntaban curiosos turistas a qué se debía, respondiendo creyentes que era por sus diversos milagros; por ello este Viernes Santos desde las 7 de la mañana afuera de su templo (en calle 5 de Mayo y 18 Poniente), ya le esperaban cientos de católicos para seguirlo durante la conocida procesión. |
MILES DE católicos en Puebla participaron en el tradicional Viacrucis que este 2013 encabezó el arzobispo Víctor Sánchez Espinosa al interior de Catedral. La fe y el fervor católico quedó plasmado durante el recorrido que realizaron por las principales calles del Centro Histórico. Diversas familias acompañaron las imágenes de la Virgen de la Soledad, de Jesús de Analco, la Virgen de los Dolores, Jesús Nazareno y el Señor de las Maravillas del Templo de Santa Mónica, que representa una de las caídas de Jesús. Niños con sus papás y personas adultas, vestidos ligeramente para soportar el calor, al igual que turistas no dejaban de tomar fotos, formaron parte de los contingentes. Desde temprano, para facilitar a los católicos poblanos su participación en la actividad religiosa, autoridades de Tránsito y Policía Municipal implementaron un dispositivo de seguridad para la procesión del Viernes Santo. La circulación vehicular la 18 Poniente- Oriente, de la 2 Norte, sobre la 16 de Septiembre, desde la 27 Poniente hasta el Zócalo, fue cerrada. Luego de que el arzobispo Sánchez Espinosa recorrió el llamado Camino de la Cruz, haciendo referencia a los pasajes que vivió Jesucristo desde que fue aprehendido hasta su crucifixión y sepultura, hizo un llamado a la reflexión sobre el significado del sacrificio, antes de dar paso a la llamada procesión del silencio, donde resaltó la necesidad de que prevalezca el amor entre los seres humanos. “Jesús que también supo lo que es el sufrimiento, nos demuestra que sí es posible seguir amando aún en medio de la adversidad”, expresó al invitar a fieles católicos a recordar el sacrificio de Jesucristo, dando paso así a la salida de la Cruz Guía, seguida por un grupo de tamborileros y atrás la imagen de la Virgen de la Soledad, cargada por decenas de devotos. De esta forma comenzó el recorrido en el que le acompañaron miles de fieles. Se estima que fueron poco más de 124 mil las personas que participaron en dicha procesión, luego del medio día, que salió desde el atrio de la Catedral y que recorrió calles del centro histórico hasta regresar al punto de partida. Luego de atravesar la avenida Reforma, hasta llegar a la 16 de Septiembre, para entrar de nuevo a Catedral, se efectuó la tercera y última reflexión, recordando la muerte de Jesucristo. Mucho llamo la atención que fue la imagen del Señor de las Maravillas, la que más fieles siguieron, lo cual preguntaban curiosos turistas a qué se debía, respondiendo creyentes que era por sus diversos milagros; por ello este Viernes Santos desde las 7 de la mañana afuera de su templo (en calle 5 de Mayo y 18 Poniente), ya le esperaban cientos de católicos para seguirlo durante la conocida procesión.