02 Junio 2013
** La presidenta de la Comisión de Medio Ambiente señala que la solución a la contaminación requiere años de trabajo  Alexsey LÓPEZ MASTRETTA VERÓNICA MASTRETTA Guzmán, presidenta de la Comisión de Medio Ambiente del municipio de Puebla, reconoció que para “revertir lo hecho” contra la naturaleza se parte de un trabajo a largo plazo. Añadió que como ciudadanos, “resarcir el daño causado a la ciudad” no se logrará de un día para otro, porque las acciones a favor del medio ambiente, que se festeja a nivel mundial este próximo 5 de junio, deben comenzar de inmediato. Asimismo, señaló que una de las prioridades a nivel internacional es el cuidado del agua, por lo que advirtió que en el caso de la capital se necesita una fuerte inyección de capital para sanear afluentes contaminados como el río Atoyac. “Se requiere dinero anualmente, que los gobiernos prioricen esto en los congresos y le den preferencia al medio ambiente con dinero. Esto no se ha hecho; se comienza a hacer, pero no se ha hecho”, declaró tajante la responsable del ámbito ecológico de la capital. De igual forma, la titular de de medio ambiente detalló que este tipo de problemas son indiferentes a la sociedad debido a que no perciben las consecuencias del deterioro del entorno. Para Mastretta Guzmán, la falta de una cultura ambiental también trae consecuencias serias para la naturaleza. En Puebla, agregó, hay poca educación para el tratamiento de desechos, situación a la que se suman los descuidos gubernamentales. “No reciclamos. Nuestro sistema de recolección es inadecuado, pasa por todas las casas pero no se fomenta el reciclaje”, complementó. Para corregir estos males, la regidora de ecología declaró que debe existir una obligatoriedad para promover la separación de la basura en los hogares poblanos. Mencionó que este tipo de acciones, antes de realizarse desde el aspecto social, deben de corregirse des de los códigos y normativas municipales. La presidenta de la Comisión de Medio Ambiente del municipio capitalino de igual forma lamentó que exista renuencia al interior de ayuntamiento para hacer una propuesta a favor del medio ambiente y donde parecería prefieren “quedarse con lo viejo”. “Hemos tenido muchas reuniones y consultas con los ejecutivos del ayuntamiento, con vecinos y consejeros del medio ambiente, con los regidores para sacar esta reforma que nos cuesta trabajo porque ha resistencia”, finalizó.