** En la sede del Campeonato Mundial de Taekwondo en el Centro Expositor, sólo tres se deja de lado la promoción de Puebla Redacción CON UN fuerte dispositivo de seguridad, la Policía Federal impide la venta de comerciantes ambulantes fuera del Centro Expositor, donde se lleva a cabo el Mundial de Taekwondo. Además, se deja de lado los productos locales. En su lugar, los de tipo gourmet tapizan los pabellones. Una vez en la puerta del recinto se logra el acceso al cruzar por uno de los ocho arcos detectores de metales que están custodiados por al menos dos uniformados, mientras, afuera no hay un solo rastro de los venderos ambulantes. Dentro, existe un letrero en inglés traducido al español con las siguientes indicaciones: acceso a aéreas generales, área de restaurantes, servicio médico y sanitarios. En el área de comida, el pabellón más grande pertenece a una de las cadenas más importantes del mundo en la venta de hamburguesas. También destaca la venta de comida gourmet (desde crepas hasta cortes argentinos) y otros locales de comida china o venta de equipo para la disciplina de combate, además de teléfonos móviles. Hay un local más dedicado a la venta de los productos oficiales del evento, estos llevan impresa a Cati, la mascota oficial, donde se puede adquirir una sudadera en 250 pesos, una playera por 180 o una taza por 65 pesos. Aunque también en uno de esos puestos se exhiben artesanías hechas por presos. A excepción de ese y otro más de dulces típicos, en su mayoría los espacios pertenecen a los patrocinadores del evento. Un boleto para las peleas de clasificación cuesta tan sólo 20 pesos, pero si se quiere permanecer en el Centro Expositor hasta el horario de las finales, se deben pagar 50 pesos, esto si no se quiere correr el riesgo de ser expulsado del lugar.
