Lunes 19 Agosto 2013
** El gobernador reconoce esfuerzo de las partes; el arzobispo pide a empresa no olvidar a eventuales  Redacción VWUN BENEPLÁCITO generalizado por el acuerdo entre Volkswagen de México y el Sindicato Independiente de Trabajadores de la Industria Automotriz Volkswagen de México (Sitiavw) fue el expresado por diversos personajes de la sociedad poblana, pues con ello se impidió que una huelga estallara ayer. El gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle Rosas, opinó que el convenio mantiene la estabilidad laboral en la entidad, sin quitarle competitividad; además, agradeció el apoyo de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), Alfonso Navarrete Prida, en las negociaciones. En la noche del sábado, el mandatario escribió en su cuenta de Twitter (@RafaGobernador): "Asimismo, reconozco el esfuerzo de directivos de la empresa y representantes sindicales para llegar a un arreglo que mantiene la estabilidad laboral en Puebla”. Asimismo, el arzobispo Víctor Sánchez Espinosa pidió a la fábrica de automóviles detener la salida de trabajadores, sobre todo los eventuales, que en breve ya no renovarían sus contratos por tiempo definido. Exhortó a los representantes de la firma a hacer su máximo esfuerzo para mantener la base laboral; “me da mucho gusto que haya diálogo. También pido diálogo para que la gente no se quede sin empleo”, dijo. En entrevista telefónica, el presidente de la Canacintra, Erich Junghanns Diestel, opinó que el alza salarial de 5 por ciento pactado, superior a los índices inflaciones nacional y estatal, apoya al desarrollo de la economía local y demuestra la sensibilidad de ambas partes; las negociaciones anteriores han sido "factores de la productividad encaminados a impulsar el crecimiento de Puebla", afirmó. Sobre el particular, el encargado de la Secretaría de Competitividad Trabajo y Desarrollo Económico (Secotrade), Michel Chaín Carrillo, consideró que el convenio entre empresa y Sitiavw, destacó la relevancia que tiene que se haya encontrado entendimiento y comprensión en las negociaciones; pero, sobre todo, la madurez de los trabajadores, quienes entendieron la crisis en el sector.