Carlos ROCHA  DESDE LAS 9 horas, beneficiarios del programa Oportunidades de la junta auxiliar San Andrés Azumiatla arribaron a las instalaciones del Centro Integrador de Servicios (CIS) con el aviso de que el gobernador y la Secretaria de Desarrollo Social entregarían ahí recursos a los pobres. Fue después del mediodía cuando una decena de camionetas arribaron a esta junta auxiliar de la capital del estado. A bordo de los vehículos, funcionarios federales, estatales y municipales se concentraron en uno de los poblados con más carencias de la ciudad. En este sitio, la calle central es la única pavimentada. Colonias como la Buena Vista, Buenos Aires, Cruzilan, Media Ladera o San Nicolás son de terracería. Entre algunos de los problemas en la zona son la presencia de vándalos que realizan pintas en las paredes y asaltan a los transeúntes. Aunque el pasado 27 de junio el gobierno del estado inauguró el Centro Integrador de Servicios (CIS), fue ayer cuando entró formalmente en operaciones con el recorrido del Ejecutivo del estado y la funcionaria federal. Cinco días atrás ninguno de los 10 médicos encargados de las áreas se encontraba en funciones y sólo la farmacia, atendida por Lourdes Valeria González Villagrán permanecía abierta. “Estamos esperando que lo abran al cien por ciento. También hay computadoras y aulas, pero no hay luz, eso es un problema”, dijo Justina Díaz Escobar, los días previos a que el CIS de esta localidad entrara de manera formal en funciones. Ayer, Rosario Robles manifestó el firme objetivo de apoyar a las familias que más lo necesitan y “lograr una Puebla sin hambre”. |