| Jorge FONSECA Un herrero de 33 años de edad perdió la vida a causa de dos disparos, uno de ellos en el pecho y el otro en la cabeza. El ahora finado y un sujeto más habrían dado un cerrón a una unidad de la ruta Enlace 2010, luego descendieron del vehículo deportivo en el que viajaban y subieron a golpear al conductor, en estas acciones se escucharon las detonaciones que segaron la vida del broncudo, cuyo cuerpo quedó tendido en los asientos traseros de la unidad. Estos acontecimientos ocurrieron alrededor de las 23 horas de este miércoles, en la calle 5 de Febrero entre calle Rubaí y Hermanos Serdán, de la colonia 18 de Marzo. Según la versión obtenida de las declaraciones del conductor agraviado, calles antes del punto antes referido, notó que hubo un percance vial, donde al parecer estaba involucrado un auto deportivo color oscuro, no pudo definir si negro o gris. Al seguir su camino en esa calle que es de una pendiente ascendente, fue alcanzado por el auto deportivo, el cual su conductor lo atravesó y le cerró el paso. El hombre pensó que se trataba de un asalto. Dos sujetos descendieron del vehículo y subieron a la unidad número 04 de la ruta Enlace 2010, donde comenzaron a golpear al conductor, este refirió que únicamente se cubrió de los golpes. En eso escuchó que los pasajeros gritaban que ya no le pegaran, viajaban a bordo tres hombres y tres mujeres. A él lo hicieron caer de la unidad y uno de los dos agresores bajó para seguir pegándole. Él logró subir de nuevo, y mientras le pegaban escuchó los disparos. En ese momento cayó abatido uno de los buscapleitos, de nombre Francisco Cabañas Alba, de 33 años, que según algunos vecinos del lugar era apodado La Paloma y era de ocupación herrero. Hasta al lugar acudieron sus familiares, que lo identificaron completamente. Su cuerpo presentaba dos impactos de bala, uno en la cabeza y otro más en el pecho. Se desconoce, hasta el momento quién disparó. Al respecto hay dos hipótesis, una de ellas que habría disparado su propio compañero de marrullerías, para ahuyentar a los pasajeros que ya amagaban con hacerles daño. La otra hipótesis, y por la que menos se inclinan las autoridades, es que alguno de los pasajeros iba armado y disparó contra el ratero. Aunque es la que consideran menos factible, no descartan ninguna de ellas. Hay que señalar que el lugar fue acordonado por elementos de la policía municipal del Grupo de Operaciones Especiales (GOES), del Sector 2 y de la policía estatal. A efectuar el levantamiento del cadáver y hacer la recolección de los indicios, acudió el fiscal de homicidios, quien efectuó las diligencias de rigor. Mientras que el grupo de peritos de la Procuraduría General de Justicia del Estado, recabó los indicios que se encontraron en el sitio del homicidio. |
