Más de 200 efectivos de seguridad pública y tránsito municipal serán desplegados para el partido de Puebla contra los Pumas Redacción Debido a que La Franja, el equipo de futbol de Puebla hará su presentación en el Torneo Apertura 2013 de la Liga MX, se desplegará un número importante de efectivos policiales, en el estadio Cuauhtémoc, cuando reciba a los Pumas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). El director de la policía municipal Gilberto Loya Chávez, dio a conocer que durante el partido que se llevará a cabo este domingo, y debido a que la porra del equipo visitante es problemática, los uniformados estarán pendientes para actuar en caso de que se requiera. Más de un centenar de uniformados permanecerán afuera del estadio Cuauhtémoc para vigilar que no se hagan desmanes en la zona. Al menos 200 elementos de la Policía Municipal vigilarán el estadio y pondrán mayor atención a la porra de las Pumas que vendrán para apoyar a su equipo que enfrenta al Puebla. En rueda de prensa, Loya Chávez informó que los uniformados permanecerán afuera del estadio y sólo ingresarán para controlar algún acto de violencia. Señaló que tendrán especial atención para la porra de los Pumas para lo que se dispondrá de una valla de seguridad en la entrada y la salida. Los aficionados de la UNAM serán escoltados hasta la autopista cuando termine el encuentro. Mientras que la dirección de Tránsito Municipal tendrá presencia para evitar que los aficionados se estacionen en lugares prohibidos y así dar una mejor accesibilidad hacia el recinto deportivo. Dentro de los antecedentes que tiene la porra de los felinos en el estadio Cuauhtémoc, destaca la del 6 de febrero del 2011, cuando la policía estatal fue la que, por varios minutos, detuvo el ingreso a la afición pumista que trataba de ubicarse en la esquina sur, en la que regularmente se colocan a las porras visitantes en el Cuauhtémoc. La carencia de elementos de seguridad fue lo que detuvo por algunos momentos el tránsito de gente, ya que no había policías que revisaran a la porra felina para ingresar, por lo que se dieron insultos e intentos de pasar a la fuerza, sin embargo tenían que ser revisados de manera minuciosa con la intención de que no portaran algún objeto prohibido al interior del inmueble