El alcalde de Huejotzingo, Felipe Gorzo Ortega, protagonizó una riña en una taquería, en la que amenazó a los trabajadores con una pistola y tras su detención chusco espectáculo brindó Víctor HERNÁNDEZ  La noche del lunes, en una taquería de San Pedro Cholula, el presidente municipal de Huejotzingo, Felipe Gorzo Ortega, protagonizó una riña en la que trascendió que amenazó a personal de aquel establecimiento con un arma de fuego y estaba en estado de ebriedad; trascendió que un día después de los hechos, el edil continuó la parranda. Por lo anterior fue detenido por elementos de la Policía Municipal de San Pedro Cholula, y al ser presentado ante las autoridades se les solicitó que se despojara de diversas prendas, entre ellas su cinturón, a lo cual obedeció, no obstante chusco espectáculo brindó a los allí presentes pues sin más, sus pantalones descendieron. Vía telefónica el Presidente Municipal aseguró que nunca estuvo detenido, aunque admitió que el incidente sí ocurrió en una taquería ubicada en el Centro de San Pedro Cholula, cuya dirección exacta dijo desconocer. A decir de las fuentes consultadas, el edil y sus acompañantes arribaron alrededor de las 23 horas a una taquería, alcoholizados y tras haber cenado se negaron a pagar una cuenta de 180 pesos. Ante el reclamo de los trabajadores, molestó, Gorzo Ortega procedió a desenfundar un arma y se negó a pagar la cuenta; tras lo anterior aparecieron los uniformados quienes cargaron con el edil. Cabe señalar que el alcalde negó haber estado a disposición de un Juez Calificador, del Ministerio Público y de un Juez de lo Penal, como consignan algunos medios en los que se asegura que Gorzo Ortega pagó una fianza, aunque otros indican que sólo fue puesto en libertad. Ya ante las autoridades, alguien avisó a diversos medios de comunicación quienes de forma pronta se plantaron a las afueras de donde se encontraba detenido Gorzo Ortega. Tras lo anterior, el edil marcó a su secretario particular, Roberto Hernández Ortega, con quienes estuvo en la taquería pero que no fue detenido, y solicitó su presencia en el lugar; cabe apuntar que el edil había señalado que el mismo alcalde, luego de negar haber sacado un arma de fuego señaló que el responsable fue su secretario particular, que había sacado un arma punzocortante para amagar al personal de la taquería. Como ya se señaló, se ignora el modo en que el alcalde fue puesto en libertad, no obstante, de acuerdo con algunas fuentes, el presidente municipal de Huejotzingo, Felipe Gorzo Ortega, fue disfrazado de policía para que, ante la presencia de los medios, pasara desapercibido. Pero la fachada de Gorzo Ortega pasó desapercibida, pues fue su mismo secretario quien, mientras sacaban al edil, gritaba desaforadamente “¡el arma, el arma!”, pues había dejado olvidada la pistola con que el alcalde amenazó a trabajadores. De acuerdo con información proporcionada por personal cercano a edil, los servidores del Ayuntamiento de Huejotzingo no toleran su presencia, pues se quejan del trato déspota que tiene para sus empleados. Cabe mencionar que se buscó al personal de Comunicación Social del Ayuntamiento de Huejotzingo para que fijara su postura con respecto a los hechos, se negaron a dar información, y en la Procuraduría General de Justicia no se confirmó si había una averiguación previa iniciada. |
La noche del lunes, en una taquería de San Pedro Cholula, el presidente municipal de Huejotzingo, Felipe Gorzo Ortega, protagonizó una riña en la que trascendió que amenazó a personal de aquel establecimiento con un arma de fuego y estaba en estado de ebriedad; trascendió que un día después de los hechos, el edil continuó la parranda. Por lo anterior fue detenido por elementos de la Policía Municipal de San Pedro Cholula, y al ser presentado ante las autoridades se les solicitó que se despojara de diversas prendas, entre ellas su cinturón, a lo cual obedeció, no obstante chusco espectáculo brindó a los allí presentes pues sin más, sus pantalones descendieron. Vía telefónica el Presidente Municipal aseguró que nunca estuvo detenido, aunque admitió que el incidente sí ocurrió en una taquería ubicada en el Centro de San Pedro Cholula, cuya dirección exacta dijo desconocer. A decir de las fuentes consultadas, el edil y sus acompañantes arribaron alrededor de las 23 horas a una taquería, alcoholizados y tras haber cenado se negaron a pagar una cuenta de 180 pesos. Ante el reclamo de los trabajadores, molestó, Gorzo Ortega procedió a desenfundar un arma y se negó a pagar la cuenta; tras lo anterior aparecieron los uniformados quienes cargaron con el edil. Cabe señalar que el alcalde negó haber estado a disposición de un Juez Calificador, del Ministerio Público y de un Juez de lo Penal, como consignan algunos medios en los que se asegura que Gorzo Ortega pagó una fianza, aunque otros indican que sólo fue puesto en libertad. Ya ante las autoridades, alguien avisó a diversos medios de comunicación quienes de forma pronta se plantaron a las afueras de donde se encontraba detenido Gorzo Ortega. Tras lo anterior, el edil marcó a su secretario particular, Roberto Hernández Ortega, con quienes estuvo en la taquería pero que no fue detenido, y solicitó su presencia en el lugar; cabe apuntar que el edil había señalado que el mismo alcalde, luego de negar haber sacado un arma de fuego señaló que el responsable fue su secretario particular, que había sacado un arma punzocortante para amagar al personal de la taquería. Como ya se señaló, se ignora el modo en que el alcalde fue puesto en libertad, no obstante, de acuerdo con algunas fuentes, el presidente municipal de Huejotzingo, Felipe Gorzo Ortega, fue disfrazado de policía para que, ante la presencia de los medios, pasara desapercibido. Pero la fachada de Gorzo Ortega pasó desapercibida, pues fue su mismo secretario quien, mientras sacaban al edil, gritaba desaforadamente “¡el arma, el arma!”, pues había dejado olvidada la pistola con que el alcalde amenazó a trabajadores. De acuerdo con información proporcionada por personal cercano a edil, los servidores del Ayuntamiento de Huejotzingo no toleran su presencia, pues se quejan del trato déspota que tiene para sus empleados. Cabe mencionar que se buscó al personal de Comunicación Social del Ayuntamiento de Huejotzingo para que fijara su postura con respecto a los hechos, se negaron a dar información, y en la Procuraduría General de Justicia no se confirmó si había una averiguación previa iniciada.