Entre las irregularidades cometidas por los mandos del Cereso están abuso de autoridad de los funcionarios, alteración de facturas, acoso laboral y relaciones con internas Jorge FONSECA  Ante la falta de respuesta del alcalde de Izúcar, Carlos Gordillo Ramírez, a poner fin a las presuntas corruptelas de su primo el director del penal de ese municipio, los regidores izucarenses enviaron un escrito a la máxima autoridad en el estado, el gobernador Rafael Moreno Valle, a quien le exponen las irregularidades cometidas por los funcionarios de dicho Centro de Reinserción Social (Cereso) solicitándole actúe en consecuencia para sancionar a estos malos servidores públicos. En dicho escrito que firman los regidores, José Bernabé Martínez González, regidor de Desarrollo Social; Cedric Solano Puig, regidor de Salud; Yaraset E. Córdova Castillo, regidora de Industria y Comercio; Olga Lilia Ortiz Ramírez, regidora de Educación; José Luis Ibarra Castillo, regidor de Agricultura y Ganadería; y Carmen Lezama Cordero, regidora de Equidad y Género, hacen mención de las irregularidades que han sido denunciadas en las últimas semanas por los medios de comunicación. Entre las irregularidades que enumeran en el escrito señalan el abuso de autoridad de los funcionarios, la alteración de facturas por parte de los funcionarios del Cereso, así como acoso laboral y el mantener relaciones con algunos de los internos del penal. Al escrito se le anexó una declaración de la policía custodio del Primer Turno de Seguridad y Custodia del Cereso de Izúcar, Rosalba Rojas Zoloaga, quien proporciona en dicho documento información sobre el mal desempeño de los funcionarios. Al respecto de Héctor Enrique Ramírez Gordillo, director del penal, lo acusa de inflar las facturas de las adquisiciones del reclusorio, incluso afirma que este personaje facturó un “proyector” el cual obtuvo mediante donación del interno “Santos de Jesús Cisneros Alberto”, este mismo interno, dice el documento firmado por Rojas Zoloaga, tiene que pagar el agua de garrafón que se consume en la institución ya que le permiten tener una tienda en el interior del reclusorio. Además la mujer custodio hace mención que el director la ha acosado en repetidas ocasiones para que presente su renuncia. Por otra parte en ese escrito se señala que Oswaldo Méndez García, quien es sobrino de Ramírez Gordillo, se encarga de adquirir el recaudo para la comida de los internos y así conseguir facturas en blanco para inflar el monto de las adquisiciones. Este hombre, dice la mujer custodio, tiene mala reputación, fue funcionario del penal de San Miguel, de donde habría salido y no de la mejor manera. Mientras que Luis Felipe Herrera López, coordinador de Seguridad y Custodia del penal, lo llama “figura de corrupción y abuso”, comenta de él que vende las camas de los dormitorios, y les cobra a los internos a cambio de permitirles tener visitas. Además de que mantiene una relación sentimental con la interna Areli Contreras Andrade, este tipo de relaciones están prohibidas en el reglamento de Ceresos. Luis Felipe Herrera López, también es señalado de sus actos machistas contra las internas, ya que en las oficinas por las noches él se quita la ropa y solo anda en calzoncillos, en el caso de la uniformada que denuncia estos hechos, comenta “me dice que no me vaya a excitar y lo vaya a violar”. Además también es acusado de abusar del personal con malos tratos e incluso de los internos, por lo que temen que con su actitud pueda ocasionar un motín. Otros de los funcionarios acusados de incurrir en irregularidades son: Bernardo Hernández Gómez, jefe de grupo del Primer Turno; Leticia Hernández Nolasco, oficial custodio del Primer Turno; Maricela Galeno Beade, oficial custodio del Tercer Turno; y Francisco Carrera Una, oficial custodio del Segundo Turno. Por todo ello los regidores piden al mandatario Moreno Valle: “se efectúe una reestructuración de los mandos del Centro de Reinserción Social de Izúcar de Matamoros, Puebla”, más adelante señalan “para poner orden tanto en el manejo de los recursos públicos y en la operatividad, y con esto evitar futuros actos de ingobernabilidad e inseguridad con la finalidad de garantizar la paz en nuestro municipio”. |
Ante la falta de respuesta del alcalde de Izúcar, Carlos Gordillo Ramírez, a poner fin a las presuntas corruptelas de su primo el director del penal de ese municipio, los regidores izucarenses enviaron un escrito a la máxima autoridad en el estado, el gobernador Rafael Moreno Valle, a quien le exponen las irregularidades cometidas por los funcionarios de dicho Centro de Reinserción Social (Cereso) solicitándole actúe en consecuencia para sancionar a estos malos servidores públicos. En dicho escrito que firman los regidores, José Bernabé Martínez González, regidor de Desarrollo Social; Cedric Solano Puig, regidor de Salud; Yaraset E. Córdova Castillo, regidora de Industria y Comercio; Olga Lilia Ortiz Ramírez, regidora de Educación; José Luis Ibarra Castillo, regidor de Agricultura y Ganadería; y Carmen Lezama Cordero, regidora de Equidad y Género, hacen mención de las irregularidades que han sido denunciadas en las últimas semanas por los medios de comunicación. Entre las irregularidades que enumeran en el escrito señalan el abuso de autoridad de los funcionarios, la alteración de facturas por parte de los funcionarios del Cereso, así como acoso laboral y el mantener relaciones con algunos de los internos del penal. Al escrito se le anexó una declaración de la policía custodio del Primer Turno de Seguridad y Custodia del Cereso de Izúcar, Rosalba Rojas Zoloaga, quien proporciona en dicho documento información sobre el mal desempeño de los funcionarios. Al respecto de Héctor Enrique Ramírez Gordillo, director del penal, lo acusa de inflar las facturas de las adquisiciones del reclusorio, incluso afirma que este personaje facturó un “proyector” el cual obtuvo mediante donación del interno “Santos de Jesús Cisneros Alberto”, este mismo interno, dice el documento firmado por Rojas Zoloaga, tiene que pagar el agua de garrafón que se consume en la institución ya que le permiten tener una tienda en el interior del reclusorio. Además la mujer custodio hace mención que el director la ha acosado en repetidas ocasiones para que presente su renuncia. Por otra parte en ese escrito se señala que Oswaldo Méndez García, quien es sobrino de Ramírez Gordillo, se encarga de adquirir el recaudo para la comida de los internos y así conseguir facturas en blanco para inflar el monto de las adquisiciones. Este hombre, dice la mujer custodio, tiene mala reputación, fue funcionario del penal de San Miguel, de donde habría salido y no de la mejor manera. Mientras que Luis Felipe Herrera López, coordinador de Seguridad y Custodia del penal, lo llama “figura de corrupción y abuso”, comenta de él que vende las camas de los dormitorios, y les cobra a los internos a cambio de permitirles tener visitas. Además de que mantiene una relación sentimental con la interna Areli Contreras Andrade, este tipo de relaciones están prohibidas en el reglamento de Ceresos. Luis Felipe Herrera López, también es señalado de sus actos machistas contra las internas, ya que en las oficinas por las noches él se quita la ropa y solo anda en calzoncillos, en el caso de la uniformada que denuncia estos hechos, comenta “me dice que no me vaya a excitar y lo vaya a violar”. Además también es acusado de abusar del personal con malos tratos e incluso de los internos, por lo que temen que con su actitud pueda ocasionar un motín. Otros de los funcionarios acusados de incurrir en irregularidades son: Bernardo Hernández Gómez, jefe de grupo del Primer Turno; Leticia Hernández Nolasco, oficial custodio del Primer Turno; Maricela Galeno Beade, oficial custodio del Tercer Turno; y Francisco Carrera Una, oficial custodio del Segundo Turno. Por todo ello los regidores piden al mandatario Moreno Valle: “se efectúe una reestructuración de los mandos del Centro de Reinserción Social de Izúcar de Matamoros, Puebla”, más adelante señalan “para poner orden tanto en el manejo de los recursos públicos y en la operatividad, y con esto evitar futuros actos de ingobernabilidad e inseguridad con la finalidad de garantizar la paz en nuestro municipio”.