Los cuerpos de los dos hombres fueron encontrados la mañana del miércoles; en el lugar se hallaron los cartuchos percutidos Víctor Hernández Agencias La Procuraduría General de Justicia ya investiga el doble homicidio registrado en las primeras horas del día de ayer en la región de Tecamachalco, luego de que un par de personas fuera asesinado a balazos por sujetos desconocidos. Por el momento, se presume que el asunto estaría relacionado con las añejas rencillas que hay entre integrantes de las familias Fuentes y Aquino en Palmarito Tochapan. Sobre el caso es escueta la información que han proporcionado, tanto la dependencia como su titular, Víctor Carrancá Bourguet, quien adelantó algunos datos pero dijo proporcionar más información sería perjudicial para el curso de las pesquisas. La madrugada de ayer, en el paraje El Trejo, ubicado a un costado de la carretera municipal de San Simón de Bravo, en el municipio de Quecholac, fueron encontrados los cadáveres de dos varones que presentaban impactos de arma de fuego en diferentes partes del cuerpo. El agente del Ministerio Público de Tecamachalco acudió al lugar, acompañado de agentes de la Policía Ministerial y peritos de la PGJ, a fin de llevar a cabo las diligencias correspondientes, mismas que quedaron asentadas en la averiguación previa 1524/2013. Los occisos fueron identificados como Javier Moisés Esteban Fuentes, de 23 años de edad, y Adolfo Aquino Fuentes, de 24 años de edad, confirmaron las autoridades. La mecánica de los hechos aún se desconoce, sin embargo, horas después del evento, el procurador de Justicia en Puebla, Víctor Carrancá, confirmó lo sucedido y dijo que se habían recolectado varios indicios por parte de los peritos, entre ellos, los proyectiles de arma de fuego que se encontraron percutidos en el lugar. El funcionario agregó que a disposición del Ministerio Público hay dos vehículos que fueron asegurados donde se llevó a cabo el levantamiento de los cuerpos, que dijo, ya habían sido identificados de manera oficial por sus familiares. Cuestionado sobre la posibilidad de que se tratara de problemas entre las familias Fuentes y Aquino, que desde hace años han dejado víctimas mortales en aquella región, el procurador refirió que es prematuro afirmar que es así. No obstante, dejó entrever que se contemplan dos posibles líneas de investigación: esa y la que apunta a disputas entre bandas dedicadas al robo de combustible en la zona de referencia, pues varias tomas clandestinas detectadas en ductos de Pemex, han sido clausuradas en el distrito judicial de Tecamachalco; otras versiones indican que los ahora occisos eran campesinos. La rivalidad Fuentes-Aquino De acuerdo con lo informado por las autoridades correspondientes, los miembros de las familias fuentes y Aquino mantuvieron una alianza delictiva por una década, de 1994 a 2004. La organización criminal se dedicaba, de acuerdo con los reportes policiales, a los asaltos en carretera, sin embargo una de las principales actividades del grupo era la venta de droga. La sociedad criminal vio finalizadas sus operaciones en el año 2004, sin embargo, el fin del grupo delictivo derivó en diferencias, que a la postre se convirtieron en enfrentamientos violentos entre los miembros de ambas familias. Los choques han dejado un saldo de varios muerto y heridos, sin embargo, es de apreciar que el número de decesos supera el de detenidos. Por su parte, las autoridades, en marzo de 2011 desplegaron un espectacular operativo en la región, con la finalidad de atrapar a los maleantes; cabe destacar que en tales hechos participaron elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), Policía Federal, Policía Auxiliar, Ejército Mexicano y Procuraduría General de la República (PGR); con número total de efectivos que rondó el millar. Tras el despliegue de tal número de unidades, sólo se logró detener a 12 presuntos delincuentes, sin embargo sólo dos fueron consignados por los delitos de lesiones y ataques peligrosos; lo que dejó a un lado los delitos de homicidio, venta de droga, posesión de armas u otros ilícitos de alto impacto. En ese momento las autoridades argumentaron que de la familia Aquino están identificados un padre y su hijo como probables responsables de algunos delitos, y sobre ellos recaían las órdenes de aprehensión, así lo informó aquella vez el entonces secretario de Seguridad Pública, Ardelio Vargas Fosado. Sin embargo, no se logró la detención de ninguno de los dos hombres señalados, lo que valió a la administración severas críticas. |