El vehículo de las féminas fue impactado por la Jeep Gran Cherokee del hoy detenido, quien se pasó el alto en un cruce de Prados Agua Azul; los decesos fueron casi instantáneos Víctor HERNÁNDEZ  Aparatoso accidente cobró las vidas de madre e hija. Los hechos se registraron el viernes por la noche en inmediaciones de la colonia Prados Agua Azul. Los reportes oficiales indican que el vehículo donde viajaban fue impacto de costado por un automovilista alcoholizado, quien se había pasado el semáforo en rojo. Ambas murieron prensadas dentro de su unidad, motivo por el cual los paramédicos que atendieron la llamada de auxilio echaron mano de equipo hidráulico para extraer sus cuerpos de los fierros retorcidos. Alrededor de las 22 horas del viernes, las hoy occisas, identificadas como Rosalba Álvarez, de 40 años de edad, y Carolina García, de 18, viajaban a bordo de un Volkswagen Pointer gris, con placas de circulación TVF 88-59 del estado de Puebla. Al circular sobre la calle 49 Poniente, justo en el crucero de la 11 Sur, una Jeep Gran Cherokee de color negro, con matrícula MBA 82-02 del Estado de México, las embistió; peritos de Tránsito municipal refirieron que el conductor se habría pasado el alto a propósito. Tras el impacto de ambos automotores, el Pointer donde viajaban las víctimas salió proyectado hasta la base del semáforo de la zona, a unos metros de la sucursal Farmatodo que se encuentra sobre la 11 Sur. Rosa conducía el coche, su hija viajaba en el asiento del copiloto y ambas quedaron prensadas tras la colisión. Los paramédicos que las valoraron al llegar confirmaron que ya no tenían signos vitales para entonces y determinaron que se trató de una muerte inmediata. Elementos de Cruz Roja y Protección Civil procedieron al acordonamiento de la zona para realizar las maniobras de rescate urbano con equipo hidráulico, de modo que fueran extraídos los cuerpos para ser entregados a personal de la Fiscalía General del Estado (FGE). Juan Carlos N, conductor del vehículo, fue asegurado y estaba en evidente estado de ebriedad cuando se le puso a disposición de la FGE. Al lugar de los hechos, además de los cuerpos de seguridad, arribaron familiares de las víctimas, entre ellos, el esposo y padre de Rosa y Carolina, quien las identificó. Entrada la madrugada de ayer los cadáveres fueron trasladados a la morgue para las necropsias de ley. |