Memorias del Crimen: El día que Dios abandonó a Huehuetlán

El 30 de abril de 2014 la naturaleza cobró la vida de 4 niños y 3 mujeres en Huehuetlán El Grande, durante los festejos del Niño Dios

Memorias del Crimen: El día que Dios abandonó a Huehuetlán
Especial | Se desplegó el Plan DN-III por parte del Ejército Mexicano para recuperar los cuerpos Memorias del Crimen: El día que Dios abandonó a Huehuetlán

Lo que debió ser un acto de fe y devoción el 30 de abril de 2014, Día del Niño y fecha en que la población de Huehuetlán El Grande festeja al Niño Dios, culminó en una tragedia provocada por una tromba que se convirtió en un caudal de piedras y lodo, que arrasó con la vida 4 niños y 3 mujeres, una de ellas con siete meses de embarazo.

Hasta antes de las 19 horas de ese miércoles, habitantes y visitantes habían acudido al templo para venerar al Niño Dios; se dirigían al tradicional jaripeo, pues ningún signo en el cielo los puso sobre aviso de lo que se venía.

La noche llegó acompañada de un intenso viento que trozó algunas ramas de los árboles, poco después se sintieron gruesas gotas de lluvia y en un instante cayó el granizo. El aguacero duró apenas 30 minutos, pero eso bastó para que de la parte alta del cerro bajaran toneladas de piedras y lodo; antaño, la salida natural del monte era la calle Palmas, y de ahí, el agua descendió hasta la calle Balcázar.

A su paso, el lodazal arrastró seis vehículos, algunos de ellos con gente a bordo, así como a personas que trataban de huir del caudal.

Luego de media hora de la torrencial lluvia, un silencio desolador se hizo presente y el servicio eléctrico dejó de funcionar. Los visitantes no podían entrar ni salir de la comunidad, y lo único que se escuchaban eran las sirenas de las patrullas y ambulancias que intentaban ingresar a la comunidad.

Los habitantes, por su parte, trataban de ofrecer auxilio a los afectados que estaban en el cauce; sin embargo, desde el primer momento se supo que había víctimas fatales.


 Lee: Hombre en situación de calle es encontrado muerto por el CESSA de Amozoc

La penumbra no se va con el sol

El primer cuerpo localizado fue el de Araceli Salas González, quien murió al instante, su cadáver estuvo varias horas en el lodo.

Ya por la mañana del 1 de mayo, fue encontrado el hijo de Araceli, un menor de 11 años, de nombre Víctor; su cuerpo fue arrastrado más de 3 kilómetros.

Martha Salas González, hermana de Araceli y tía de Víctor, estuvo desaparecida por más de 12 horas hasta que la localizaron sin vida a más de 7 kilómetros. En la misma zona fue encontrado el cadáver de una menor identificada como Briseida de 10 años de edad, hija de Martha.

Jamás volvieron

La madrugada del 1 de mayo fue localizada muerta María del Rosario Valencia, de 24 años, quien presentaba un embarazo de 7 meses. La mujer estaba dentro de su camioneta con sus hijos Dylan, de 4 años, y Dorian, de 2, quienes también murieron, pues su auto fue arrastrado por la corriente varios kilómetros.

María, sus hijos y su esposo, Antonio Quinto Ochoa, de 25 años, llegaron a Huehuetlán para vender artesanías en la feria. Cuando comenzó la lluvia, el padre bajó de la camioneta a comprar anticongelante, pero cuando intentó regresar la troca ya estaba siendo arrastrada por el agua.

La familia era vecina de la colonia Nuevo Plan de Ayala, en Puebla. En medio de la desesperación, Antonio intentó salvar a su familia, según contaron testigos, pero la fuerza de la naturaleza se la arrebató de las manos.

Un testigo de nombre Aurelio Islas comentó que apenas pasó la lluvia, José Antonio corrió a la barranca donde estaba su camioneta y comenzó a buscar a su familia, pero encontró el cadáver de su esposa.

Horas de impotencia

Para las labores de búsqueda se desplegó el Plan DN-III por parte del Ejército Mexicano, además se contó con la intervención de Protección Civil (PC) y se sumaron vecinos.

Los trabajos de rescate se suspendieron la madrugada del 1 de mayo alrededor de las 4:30 horas, pues la visibilidad era nula y las condiciones del terreno difíciles. Al amanecer se formaron brigadas de búsqueda.

El entonces gobernador, Rafael Moreno Valle se trasladó a Huehuetlán para coordinar las labores que restaban y ofrecer ayuda a los afectados.

Días antes, el 28 de Abril de 2014, el Sistema Meteorológico Nacional (SMN), había advertido de una tromba en la zona de Huehuetlán El Grande.