Puebla apuesta por plantas procesadoras de basura
La nueva estrategia ambiental se enfocará en el tratamiento y aprovechamiento de residuos sólidos para generar energía.
La vida útil de los rellenos sanitarios del estado de Puebla se encuentra al límite, por lo que es momento de apostar no por la ampliación de dichos espacios, como se ha hecho en administraciones anteriores, sino que se deben aprovechar los residuos para generar energías renovables, aseveró Beatriz Manrique Guevara, titular de la Secretaría de Medio Ambiente. Informó que una vez que termine la inspección total de rellenos, comenzarán los acercamientos con autoridades municipales y algunas concesionarias, para potenciar un proyecto ejecutivo que se enfoque tanto en el tratamiento como en el aprovechamiento de los residuos.
“Puebla, como el quinto estado en importancia en el país, debe ser punta de lanza para aprovechar su posición geográfica y las condiciones para la inversión en la creación de energía,” indicó. La titular de Medio Ambiente reveló que en la entidad se implementará un proyecto ambicioso, que contempla la sustitución de rellenos sanitarios por plantas procesadoras de basura que conviertan los desperdicios en composta, energía eléctrica o biogás. Adelantó que en las propuestas presentadas al gobernador Luis Miguel Barbosa se plantea iniciar este nuevo modelo en los municipios de Tehuacán, Huauchinango y Amozoc, con inversiones privadas y una empresa, a la cual sólo le proporcionarán el terreno y la basura para laborar. “Ya no va a haber rellenos sanitarios, porque ya la norma internacional los prohíbe. Lo que vamos hacer son plantas procesadoras de basura, que el único que nos lleva una ventaja adelante es Monterrey, pero ya tenemos una empresa que realizaría los trabajos.” En Monterrey, el biogás producido por la descomposición de 4 mil 500 toneladas diarias de basura se aprovecha para generar energía y alimentar el 80 por ciento del alumbrado público de siete municipios del área metropolitana, así como las líneas 1 y 2 del sistema Metrorrey, el Palacio de Gobierno, el DIF estatal y las oficinas generales de Agua y Drenaje.
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