El agua y los bosques son parte de un legado milenario que nos ha permitido sobrevivir como especie; de aquí la importancia de hacer conciencia para su cuidado y de sumar esfuerzos entre los distintos niveles de gobierno, instituciones y sociedad en general, afirmó la Rectora de la BUAP, Lilia Cedillo Ramírez, al inaugurar el Festival Nacional por el Agua y los Bosques “Por una cultura del cuidado de la vida”, con sede en Puebla.

“Cuando destruimos un bosque o cambiamos el uso de suelo, lo que provocamos es que especies nativas desaparezcan o que especies animales, muchas de ellas portadoras de virus, tiendan a migrar a otros sitios y de manera accidental entren en contacto con los humanos. Es necesario que tomemos conciencia de la necesidad de cuidar el medio ambiente; sobre todo ahora que vivimos las consecuencias de nuestros actos”, refirió.

Las actividades de este festival incluyeron conferencias y eventos culturales de forma virtual, de manera paralela con programas organizados en cada estado del país. Al respecto, el maestro Fernando Silva Triste, representante de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales en Puebla, agradeció la colaboración de la BUAP y de las demás dependencias que se sumaron a este esfuerzo para el cuidado del agua y los bosques.

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“Buscamos que este evento sea un arranque de la colaboración entre el sector federal vinculado al cuidado del medio ambiente, la BUAP y las comunidades, para trabajar a favor de la protección y cuidado del medio ambiente y los recursos naturales, en especial del agua y los bosques”, expresó.

Por su parte, el director del Herbario y Jardín Botánico de la BUAP, Francisco López Olguín, consideró que pese a los daños ocasionados a las zonas protegidas aún son posibles acciones globales para reducir las amenazas contra la vida en el planeta. A propósito de esto, recordó el acuerdo internacional Agenda 20-30 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible, entre los cuales destacó la dignidad, la igualdad de las personas en un medio ambiente saludable, la protección del planeta y la transformación de las economías para una vida próspera y plena en armonía con la naturaleza.

En esta inauguración, la doctora Cedillo Ramírez estuvo acompañada de la directora de la Facultad de Ingeniería Química, la maestra Guadalupe Tita Vázquez Espinosa de los Monteros, así como de los funcionarios titulares de la CONANP, CONAFOR, PROFEPA y CONAGUA.

Hay que recordar que México es uno de los 10 países con mayor superficie de bosques primarios que mantienen una gran biodiversidad y variedad de ecosistemas, además de representar el hábitat de pueblos y comunidades indígenas. No obstante, el impacto de la deforestación, el cambio de uso de suelo para la ganadería y agricultura, así como los incendios forestales, la tala ilegal, el uso de pesticidas, el saqueo de especies y la extracción de maderas preciosas, amenazan fuertemente la riqueza natural del país.

Conservar los bosques es un deber de gobiernos y sociedad en general, porque de esto depende la sobrevivencia humana y el bienestar de las generaciones presentes y futuras.