La pandemia por el COVID-19 orilló a que los comerciantes ambulantes migraran al mundo digital, pues lograron comercializar sus productos a través de grupos de WhatsApp y Facebook; si bien el fenómeno del Coronavirus terminó, la venta vía virtual se quedó para los comerciantes que no están establecidos.

La pandemia generó que mucha gente perdiera su trabajo, además de que se prohibió salir. Aunque hubo excepciones, pues algunos sí tomaron las calles, la población en su mayoría comenzó a comercializar sus productos desde sus hogares. 

Estos fueron tanto alimentos, como ropa, productos de cocina y electrónicos, entre otros.

Incluso se dio la venta de bebidas alcohólicas que iban a dejar personalmente de puerta en puerta, a fin de mantener a sus clientes contentos y obtener recursos.

Venta de productos a través de redes sociales

En grupos de WhatsApp de diferentes colonias se puede apreciar la venta de todo tipo de productos, los cuales son promocionados con imágenes editadas.

Los productos son las famosas micheladas, azulitos, ropa, comida, pan y hasta postres. 

Asimismo, en Facebook se puede localizar este tipo de venta, lo cual se pudo verificar en cuentas tales como San Bartolo, La Margarita Bosque de San Sebastián.

El modelo que siguen los comerciantes son, en primer lugar, promocionar sus productos y esperar el mensaje con el pedido de sus clientes, quienes les deben proporcionar una dirección y número de teléfono para comunicarse en caso de que no les abran la puerta.

Al llegar al domicilio indicado, los ambulantes otorgan el producto y reciben el pago en efectivo.

Otra forma de cobro es por medio de transferencia, la cual deben comprobar una vez hecho el pago con una imagen para que puedan hacer la entrega.

Los horarios de entrega van de 8 de la mañana hasta las 11 de la noche, pues muchos productos se comercializan a mediodía.

Con esto, los ambulantes impulsan su economía, pues también siguen comercializando en la vía pública, lo cual ha sido su origen de venta.

Algunos de los comerciantes incluso recibieron el nombramiento de “nenis”, aunque estas personas se diferencian al citar a sus clientes en un punto específico.

Aumento y decremento de ambulantaje en el Centro Histórico

Los ambulantes se volvieron una problemática en la capital poblana durante el gobierno de Claudia Rivera, pues llegaron a existir hasta mil 500 comerciantes en las primeras calles del Centro Histórico.

Este número se redujo a 500 con el gobierno de Eduardo Rivera Pérez, lo cual ha sido un logro de la actual administración, que no ha dejado de vigilar a los comerciantes del primer cuadro de la ciudad.