La dirigencia estatal de Morena no solo excluyó a la comunidad LGBT+ en la designación de sus candidaturas, también lo hizo con las y los representantes de los pueblos indígenas de Puebla.

El estado de Puebla se ubica en el lugar número ocho de las entidades con mayor número de hablantes de alguna lengua indígena, entre las que se encuentran el popoloca, totonaca, y náhuatl, entre otras.

Sin embargo, la dirigencia estatal de Morena se ha visto nada inclusiva en este 2024, pues no solo desplazó a la comunidad LGBT+ de las candidaturas, sino que también ha hecho lo propio con representantes de los pueblos indígenas.

El caso más claro es el que se vive en Zacatlán, donde algunos pobladores acusaron de imposición para la candidatura del Distrito III, donde colocaron a Fátima Cruz.

En total, fueron 13 las y los aspirantes que presentaron una queja por dicho suceso, entre ellos María del Carmen Cabrera (exdiputada local), Alejandro Martínez, Evelia Hernández Juárez y Pablo Alejandro López Pacheco, entre otros.

“Presentamos ante ustedes nuestra inconformidad por la imposición de la diputada federal Fátima Cruz, por no representarnos y no ser parte del proceso de encuestas”, menciona el documento.

Por otro lado, en Ajalpan la candidatura fue para el expriista Adolfo Alatriste, quien no representa al pueblo indigena de la zona.

Otros municipios que sufrieron el desplazamiento de representantes indígenas, pese a tener una gran población indígena, fueron Huauchinango, donde se colocó a Gissel Santander; Teziutlán con Marilyn Ballesteros; y Zacatlán con Fátima Cruz, quien repetirá su curul en el Congreso del Estado.

De igual forma, ningún aspirante de representación indígena fue seleccionado en la lista de candidaturas plurinominales de Morena.

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