En la capital poblana existen cafeterías, bares y restaurantes Pet Friendly, es decir, que permiten el acceso de mascotas dentro del local y así tener opciones para salir a pasear con tu lomito o michi.

Las gerencias de dos locales Pet Friendly nos relataron cómo es la dinámica entre los comensales y las mascotas dentro del local, así como sus reglamentos a seguir con los perritos.

Mónica Flores es gerente del restorán Frenchies en el Centro Histórico, el local se encuentra justo frente a la Catedral de la capital poblana aún lado del zócalo.

Ella nos platicó que la temática del lugar es de perritos bulldog francés, de ahí el nombre del lugar. Explicó que, cualquier comensal puede ingresar con su mascota si así lo desea; claro, con sus respectivas reglas como el uso de la correa en todo momento.

“Todas las mascotas son bienvenidas a Frenchies café, desde la más chica hasta la más grande. Obviamente con cuidado de sus dueños. Nosotros manejamos un reglamento interno que se le entrega al dueño de las mascotas”, explicó.

En Frenchies Café tienen comederos para los perritos que lleguen al local, ahí también pueden pedir comida para sus lomitos, como carne de res o palomitas.

Otro lugar que te puede interesar es el Wild Dog, un restaurant bar que tiene la temática de perritos, tienen espacios especiales para los comensales que acuden con su perrito.

Ángel Mendoza gerente de Wild Dog relató que el concepto del lugar es para que los dueños de mascotas tengan un espacio al cual puedan llevar a sus lomitos.

“Parte de nuestro protocolo es cuidar a los clientes como a los perritos. Cuando llegan, de primera instancia se les regala una carnaza, agüita para el perro y obviamente pueden estar centrados junto con ellos,” explicó.

Al igual que en Frenchies, en Wild Dog también tienen sus reglas para que los perritos y los comensales estén seguros y coman de manera tranquila perritos y humanos.

Wild Dog además de ser un local Pet Friendly, también es un local con causa, pues tienen un programa donde recolectan dinero para comprar croquetas para donarlas a albergues.

Esta dinámica funciona por su postre con causa, el cual es un brownie y el 15 por ciento de su costo se recolecta para comprar croquetas y entregarlas a unos de los siete albergues de los que son aliados.