Estar en más de un tipo de pantalla, algo que popularmente se conoce como multiplataforma, es un aspecto clave para entender el éxito que tienen algunas compañías en internet. Esta inversión, que se basa en el concepto de la versatilidad, intenta que la página web y su contenido puedan ser consumidos y adaptados sin fallos por los principales sistemas operativos actuales sin la obligación de crear una versión única y diferente para cada uno de ellos.

Así pues, encontramos plataformas que van desde la mensajería instantánea hasta el consumo de material audiovisual; pasando por el entretenimiento digital o los portales de centros universitarios. Todos ellos pueden ser consumidos mediante smartphone, tableta o televisor inteligente a través de aplicaciones o de la computadora con la versión adaptada a los navegadores web. En un solo clic y siempre que se cuente con internet, es posible conectarse.

Otro ejemplo que podemos encontrar que ha migrado a todo tipo de pantallas es el juego online con prácticas como el póker. Esta actividad tradicional, que antes solamente se podía concebir de manera física, se presenta en plataformas especializadas ofreciendo diferentes prestaciones a sus usuarios. Más allá de las partidas y campeonatos en formato multiplataforma, cuenta con información de calidad para sus jugadores como las diferentes modalidades o nociones de cómo jugar.

Ventajas de la multiplataforma

Uno de los principales beneficios que se pueden observar en las aplicaciones y contenido multiplataforma es que supone un gran ahorro económico y de tiempo para la compañía. Si desde cero se produce un material que sea adaptable a los diferentes dispositivos inteligentes, se evitará tener que ir realizando pequeñas modificaciones en él; aunque uno de los principales costes se encuentra en el momento en que una compañía debe hacer el traspaso de información.

Adaptarse a todo tipo de pantallas también es un gran momento para darse a conocer entre el posible público que pueda estar interesado en los servicios que se ofrecen. Es toda una oportunidad para mostrar una imagen moderna e innovadora de la marca, demostrando la capacidad de adaptación a los tiempos más modernos. Además, en plataformas como el smartphone es donde se da el mayor número de tráfico de usuarios.

Otro de los beneficios que se pueden extraer de esta adaptación es el hecho de recoger todo tipo de información beneficiosa de cara al futuro. En muchas ocasiones, poniendo por ejemplo las aplicaciones, se pide la introducción de datos personales a los internautas, y esta información que se brinda puede ser de gran utilidad para establecer acciones futuras. Saber la edad, el sexo, la ubicación o los intereses es una información que vale su peso en oro.

El hecho de estar en varias plataformas también hace que se modernice todo el tipo de contenido y posibilidades que se ofrezcan al usuario. Un caso que ejemplifica lo comentado es cómo los dispositivos de realidad virtual se han ido integrando en varias plataformas como las videoconsolas o los diferentes métodos de pago que están presentes en la actualidad y que son de uso ya frecuente como los pagos móviles o las billeteras digitales, más allá de las clásicas tarjetas de crédito.

En términos de posicionamiento web, la multiplataforma es un aspecto que se valora mucho. Como hemos comentado, el smartphone es el dispositivo más utilizado en este momento, seguido de la computadora. Así pues, fidelizar a los diferentes tipos de usuarios, que en ocasiones pueden responder a un mismo perfil, es clave para que los buscadores nos posicionen en lo más alto y el sitio web sea consultado indistintamente y todo el mundo se sienta integrado en él.

Inversión de gran retorno

Sí que es cierto que crear un sistema que permita que el contenido sea adaptado a todo tipo de pantallas puede tener un precio importante en un principio, pues entrarán en juego un equipo de desarrolladores informáticos. No hay coste exacto sobre este paso a la multipantalla, pero sí que es cierto que para muchas compañías el retorno que puede comportar es mucho mayor que el desembolso inicial, ya sea mediante la recogida de datos, la publicidad o directamente las ventas.