Energía Renovable y su importancia en nuestro medio ambiente

La energía renovable ha sido un tema de creciente importancia en las últimas décadas, ya que ofrece una alternativa más sostenible y respetuosa

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Importancia de su aplicación 

La energía renovable ha sido un tema de creciente importancia en las últimas décadas, ya que ofrece una alternativa más sostenible y respetuosa con el medio ambiente en comparación con los combustibles fósiles.

A lo largo de la historia, el ser humano ha utilizado diferentes fuentes de energía renovable, aunque su aplicación a gran escala ha sido más reciente.

Históricamente, la energía renovable ha sido utilizada por civilizaciones antiguas para satisfacer sus necesidades energéticas.

Por ejemplo, los molinos de viento se utilizaban en la antigua Persia para moler granos y extraer agua de pozos.

En la antigua Grecia y Roma, se utilizaban sistemas de calefacción basados en la energía solar pasiva, donde los edificios eran diseñados para aprovechar la luz solar y el calor.

En la era moderna, el interés por las energías renovables ha ido en aumento debido a la preocupación por el cambio climático y la búsqueda de alternativas a los combustibles fósiles.

Las principales fuentes de energía renovable incluyen la solar, eólica, hidroeléctrica, biomasa y geotérmica.

Una de las ventajas más destacadas de la energía renovable es su capacidad para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. A diferencia de los combustibles fósiles, las fuentes renovables no emiten dióxido de carbono ni otros contaminantes dañinos durante su operación.

Esto contribuye a mitigar el cambio climático y reducir la contaminación del aire, mejorando la calidad de vida de las personas. Se basan en recursos naturales inagotables

Otra ventaja es su carácter inagotable. Las fuentes renovables, como la energía solar y eólica, se basan en recursos naturales que están disponibles de manera continua y a largo plazo.

Esto contrasta con los combustibles fósiles, cuya disponibilidad es limitada y está sujeta a fluctuaciones en los precios internacionales y a problemas geopolíticos.

Sin embargo, también existen desventajas asociadas a la energía renovable. Una de ellas es la intermitencia de algunas fuentes, como la solar y la eólica.

La generación de energía solar depende de la disponibilidad de luz solar, mientras que la energía eólica requiere de vientos adecuados. Esto implica que no siempre se pueda contar con una producción constante de energía, lo que plantea desafíos en términos de estabilidad del suministro y almacenamiento de energía.

Además, la instalación de infraestructuras para aprovechar la energía renovable puede tener un impacto visual y ambiental.

Los parques eólicos y las plantas solares ocupan grandes extensiones de terreno y pueden alterar los ecosistemas locales. También se plantean preocupaciones sobre la afectación de aves migratorias y la posible contaminación acústica.

En cuanto a su aplicación en los gobiernos, muchos países han implementado políticas y programas para fomentar el uso de energías renovables.

Estas medidas incluyen incentivos económicos, como subsidios y tarifas de alimentación, para promover la inversión en tecnologías renovables.

Algunos gobiernos también han establecido objetivos ambiciosos de energía renovable, con el fin de reducir la dependencia de los combustibles fósiles y fomentar la transición hacia un sistema energético más limpio.

En varios países, se han creado programas de energías renovables que han permitido la instalación de parques solares y eólicos a gran escala, así como el desarrollo de tecnologías más eficientes y económicas.

Estas iniciativas han contribuido a aumentar la capacidad de generación de energía renovable y a diversificar la matriz energética.

Los avances de México con la energía limpia

En el ámbito de los gobiernos, México también ha impulsado el desarrollo de energías renovables. El país cuenta con un gran potencial en recursos renovables, especialmente en energía solar y eólica.

El gobierno mexicano ha implementado políticas y programas para fomentar la adopción de energías limpias y reducir la dependencia de los combustibles fósiles.

En 2015, se promulgó la Ley de Transición Energética en México, estableciendo metas ambiciosas para aumentar la participación de las energías renovables en la matriz energética del país.

Esta ley ha fomentado la realización de subastas de energía limpia, en las cuales se otorgan contratos a largo plazo para proyectos renovables. Estas subastas han resultado en la instalación de parques solares y eólicos a gran escala, impulsando significativamente la generación de energía renovable en el país.

Además, se han implementado esquemas de tarifas preferenciales y subsidios para promover la instalación de sistemas de energía solar en hogares, empresas e instituciones.

Estos incentivos han contribuido a la adopción de la energía solar distribuida en México, permitiendo que más personas generen su propia energía limpia y reduzcan su dependencia de la red eléctrica convencional.

En el sector de la energía eólica, se han otorgado concesiones y permisos para el desarrollo de parques eólicos en diferentes regiones del país, especialmente en el Istmo de Tehuantepec, Oaxaca.

Estos proyectos han aumentado la capacidad de generación de energía eólica y han contribuido a diversificar la matriz energética de México.

El gobierno mexicano también ha promovido la inversión en proyectos de energía geotérmica, aprovechando el potencial geotérmico del país.

Se han llevado a cabo proyectos de exploración y desarrollo de plantas geotérmicas en lugares como

Los Azufres, Michoacán, y el Campo Geotérmico Cerro Prieto, en Baja California. Estas iniciativas han permitido aumentar la generación de energía a partir del calor interno de la Tierra.

México ha puesto en marcha políticas y programas para fomentar el desarrollo de energías renovables, tanto a gran escala como en instalaciones distribuidas.

La implementación de parques solares, parques eólicos y plantas geotérmicas ha contribuido a diversificar la matriz energética del país y reducir su dependencia de los combustibles fósiles.

A medida que avanza hacia un futuro más sostenible, México continúa impulsando la aplicación de la energía renovable para garantizar una fuente de energía más limpia y respetuosa con el medio ambiente.