México espera el impacto de una DANA en Navidad

Este 24 y 25 de diciembre, varios estados de la república mexicana, como Puebla, la Ciudad de México, Veracruz y el Estado de México, estarán bajo la influencia de un fenómeno climático conocido como DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos de la Atmósfera). 

Aunque este fenómeno ha causado estragos en Europa, particularmente en España, los expertos aseguran que en México no se esperan daños tan severos, pero es importante mantenerse informado y preparado ante las posibles afectaciones.

¿Qué es una DANA?

Una DANA es una masa de aire frío que se forma en las capas altas de la atmósfera, generalmente entre los 5 y 10 km de altitud. Este fenómeno se caracteriza por su aislamiento y por la inestabilidad que genera en las condiciones climáticas de las regiones donde ocurre. 

Al estar aislada de los vientos principales, la DANA puede generar lluvias intensas, tormentas eléctricas y un descenso en las temperaturas.

En el caso de México, la DANA que se aproxima no provocará los daños devastadores que se han registrado en otros países, pero sí podría generar fuertes lluvias y ráfagas de viento, afectando principalmente las regiones centro y sur del país. 

Las autoridades meteorológicas han advertido que, aunque no se prevén inundaciones catastróficas, es recomendable estar alerta a las posibles lluvias y tormentas locales.

¿Qué efectos puede llegar a tener la DANA en territorio mexicano?

Los efectos más visibles de una DANA en territorio mexicano incluyen precipitaciones que pueden llegar a ser intensas en algunas áreas, especialmente en las zonas montañosas. 

Asimismo, se espera que las temperaturas bajen considerablemente, especialmente en las zonas altas del país. Además, las tormentas eléctricas podrían ser frecuentes, por lo que se recomienda a la población tomar precauciones, como evitar estar al aire libre durante las lluvias fuertes.

A pesar de que la DANA no representa una amenaza tan grave como en otras partes del mundo, las autoridades meteorológicas piden a la población estar atenta a los comunicados oficiales y tomar medidas preventivas, sobre todo aquellos que residen en áreas de mayor riesgo de inundación o deslizamientos de tierra.