| Julio César, el boxeador policía, pasó a las finales del Torneo de Boxeo por Equipos, donde irá por el triunfo para representar al estado a nivel nacional René VALENCIA* El poblano Julio César El Jaguarcito Serrano Tello es un ejemplo del deporte estatal. Padre y esposo dedicado, así como gran amigo, son algunos de los cumplidos ganados por el boxeador y policía municipal de San Andrés Cholula, quien el sábado pasado obtuvo el triunfo que le permitió ser finalista del Torneo de Boxeo por Equipos. La cita fue a las 16 horas en el Polideportivo del Parque Ecológico. En una esquina del inmueble, los competidores practicaban con sus sombras mientras esperaban el momento de subir al encordado. Mientras, las familias de los boxeadores disfrutaron de la algarabía de las exhibiciones, como un previo para ensalzar el ambiente entre los apasionados del deporte de los guantes. En un rincón, Julio César Serrano Tello, de 29 años, ensayó la devastadora combinación que poco después le daría la victoria. El Jaguarcito ha dedicado los últimos tres años de su vida al boxeo. Asimismo, está decidido a ser una inspiración para su hijo de 8 años, Julio Osvaldo Serrano Quecholac, a quien llevó en 2012 a un gimnasio para que tomara como hábito el deporte; sin embargo, el pequeño siguió los pasos de su padre y quedó cautivado con los guantes. Con respecto a su acercamiento a este deporte, el policía pugilista comentó: “En las prácticas y en los entrenamientos fui dando resultados y debido a eso me fui metiendo más de lleno en esto”. Esta práctica la combina con su trabajo en el cuerpo de policía de San Andrés Cholula: “Me gusta ayudar a la sociedad, porque la verdad la situación está muy crítica, entonces esto me hace estar consciente e intentar tratar que exista menos delincuencia”. Desde hace dos años desempeña su labor de vigilante policiaco, pues le motiva saber que apoya a la gente. Pese a la larga y extenuante jornada laboral, al final del día sólo piensa en que ayuda a cambiar un poco su entorno, aunque su familia vive en una incertidumbre constante. Lo mismo ocurre cuando se enfunda los guantes. Sus parientes temen por su seguridad: “Me pongo nervioso porque me da miedo que le den un golpe (a Julio César) y salga fracturado”, comentó el primogénito del deportista. En tanto, Míriam Quecholac Guerrero destacó que su pareja es un hombre muy disciplinado y comprometido con sus pasiones. Ambos mantienen una relación desde hace 11 años. Recordó que se conocieron de niños y después dejaron de verse, pero al reencontrarse nació el amor entre ellos y cada día “crece más”. Por su parte, Andrea Patricia Tello Martínez, madre del deportista, relató: “Nunca consideré que le gustara esto, fue una sorpresa que me lleve. De un momento a otro quiso este deporte y ha salido adelante”. La pela Julio César Serrano, durante el torneo, estuvo acompañado por sus familiares. En punto de las 17 horas El Jaguarcito subió al ring; su oponente era Miguel Rivera. La categoría en que ambos compitieron fue la de pesos ligeros, con 60 kilos. Sonó la campana. Julio César comenzó con el juego de piernas sobre la lona. Él vestía un uniforme azul y su contrincante uno escarlata. Como suele ocurrir, los primeros minutos de la batalla fueron de conocimiento, de estudio del rival. Poco después Miguel Rivera tomó la delantera, incluso arrinconó contra las cuerdas a Serrano Tello Antes de culminar el primer round El Jaguarcito logró conectar en el centro del rostro de Miguel Rivera, quien de inmediato comenzó a sangrar por la nariz. Entonces el réferi intervino y tomó una decisión: knockout. Apenas al bajar del ring, el boxeador comentó para El Popular, diario imparcial de Puebla: “Me sentí bien al ganar, la verdad mi oponente se esforzó pero nosotros sacamos más la condición para evitar los golpes”. Ser mejor, el objetivo La travesía de El Jaguarcito no culminó con esta batalla. El próximo sábado buscará ser el mejor del estado centro de su categoría al disputar la final del certamen; en caso de ganar representaría a Puebla en las olimpiadas nacionales. Pero estos no son sus únicos planes, pues también se prepara para concluir sus estudios en preparatoria abierta y comenzar su educación superior en la licenciatura en Derecho: “Quiero superarme porque una de mis metas es no quedarme estancado”, concluyó el triunfante boxeador policía. *Egresado de la Escuela de Periodismo de El Popular, diario imparcial de Puebla. |
