Si has probado todo tipo de dietas y ninguna te ha funcionado, entonces debes intentar estas dietas cuya base no está en lo que se come sino en cómo se come. Conoce a la dieta Okinawa, es una de las más bajas en calorías y densas en nutrientes. Este régimen alimenticio proviene de una de las regiones más pobres de Japón durante la Segunda Guerra Mundial. Las dietas además de brindar un peso balanceado, promueven una vida activa, saludable y longeva.

Libre de lácteos

Se trata de adoptar el hábito de consumir la mínima cantidad de este producto, pues no forma parte de la alimentación que el ser humano debe tener, así que el sustituir leche, yogur o queso por pescados y verduras frescas es imperativo.

Alimentación integral

Los japoneses como se sabe, comen todo tipo de platillos preparados con arroz o fideos, pero el truco está en cocinarlos con ramen, udon, soba o granos de trigo, los cuales poseen menos carbohidratos que los cereales convencionales con los que se cocina el arroz o la pasta.

Okinawa

Cuando alguien decide hacer esta dieta nunca debe levantase de la mesa sintiéndose totalmente satisfecho, además debe incluir en su día siete raciones de frutas, vegetales, cereales, legumbres o frutos secos, dos de soya, mucha agua y té verde, comer poca carne y mucho pescado.

Dieta de los palillos

La estrategia radica en comer todo lo que te pongan enfrente con palillos en lugar de tenedor o cuchara, sin prisa y con mucha habilidad debes llevarte la comida a la boca para que tu cerebro asimiles mejor lo que estás haciendo y sepa cuando se sienta satisfecho.

El desayuno variado

Desde sopa de miso hasta soya con hierbas puedes complementar tu desayuno, en Japón esto se acostumbra. Como van pasando las horas disminuye la cantidad de comida que ingieren para que en la cena sea muy ligera.