Hay personas a quienes les afectan los alimentos que contienen gluten. Éste es una proteína que algunos sistemas no pueden digerir bien pues no disponen de las enzimas necesarias, lo que puede provocar problemas intestinales. A esta reacción se le conoce como enfermedad celíaca o sensibilidad al gluten, e incluye alergia respiratoria, alimentaria o de contacto.

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Síntomas

La enfermedad celíaca se caracteriza por una lesión de la mucosa del intestino delgado que provoca una atrofia, la cual produce una inadecuada absorción de los nutrientes. Las personas que la padecen pueden tener diarrea crónica, hinchazón abdominal, estreñimiento, náuseas y vómitos, anemia, debilidad generalizada, erupciones cutáneas, estreñimiento, dolor de cabeza, alteraciones del esmalte dental, raquitismo o fracturas espontáneas. La alergia, en cambio, puede desarrollarse a cualquier edad y puede notarse desde un sarpullido alrededor de la boca hasta un grave cuadro de choque anafiláctico. Sus síntomas incluyen vómitos, dolor abdominal, diarrea, sangrado digestivo, asma, tos, laringitis, rinitis, conjuntivitis, urticaria, edema o inflamación y dermatitis atópica.

Lo que debes evitar

Tienes que olvidarte de los embutidos, conservas de carne y de pescado, sobre todo si llevan salsas, condimentos, postres, lácteos, quesos fundidos, de untar o rallados, sustitutos del café, chocolate y cacao, turrones, botanas como caramelos o golosinas fritas, harinas de arroz u otros cereales e incluso uno que otro maquillaje, pues algunos tienen ingredientes naturales y tu piel mostraría una reacción.

Dieta

Para quienes lo padecen, los especialistas recomiendan una dieta estricta con alimentos naturales como carnes, pescado, huevo, frutas, verduras, legumbres, hortalizas y tubérculos, principalmente maíz y arroz. Pueden tomar infusiones con azúcar y miel, frutos secos naturales, aceites de oliva o semillas y no ingerir alimentos empaquetados o procesados.

Cuidados

Tienen que estar en chequeos constantes, para evitar descompensaciones por la falta de calcio, carbohidratos, proteínas y pérdida de masa muscular. Además su doctor de cabecera debe indicar alimentos para reponer los micro-nutrientes como el hierro, ácido fólico, calcio, cobre, zinc y vitaminas B y D. Incluso quienes la padecen tienen el riesgo de desarrollar otras enfermedades como el linfoma de Hodgkin, cáncer de intestino, adenocarcinomas esofágico, pancreático y de hígado; cáncer de mama, pulmón y colon; padecimientos cardiovasculares, diabetes tipo I, tiroiditis, enfermedad de Addison, Síndrome de Sjögren, lupus, hepatitis autoinmunes y nefropatías.