Conoce este barrio ecológico

El canal lateral del río IJ, denominado Johan van Hasseltkanaal y ubicado en el norte de Ámsterdam es, por ahora, un lugar tranquilo, pero eso cambiará en los próximos meses, cuando sea el hogar de un nuevo vecindario flotante llamado "barco limpio", nombre que enfatiza su respeto por el medioambiente y el uso racional de los recursos naturales.

Características

Este emprendimiento, que se está construyendo y formará parte del barrio industrial Buiksloterham, constará de 46 viviendas familiares que alojarán a más de un centenar de habitantes y un centro comunitario, situados en 30 parcelas que descansarán sobre las aguas, convirtiéndose, en 2020, en el vecindario flotante más sostenible de toda Europa, según sus promotores.

Elementos

Contará con 500 paneles solares que producirán electricidad y la almacenarán temporalmente en baterías situadas en las viviendas, mientras que el agua caliente para los grifos y las duchas, así como la temperatura necesaria para la calefacción, serán producidas por bombas de agua caliente, un sistema que genera calor extrayendo el calor del agua del canal y transportándolo hacia unas calderas que aprovechan la radiación solar térmica, añaden.

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Las primeras siete casas ya están ancladas

 "En octubre de 2018 se concluyó el gran muelle con cinco entradas bajo el cual están los cables y tuberías para electricidad, agua, wifi y alcantarillado, el cual servirá como conexión entre todas las casas, pavimento y lugar de reunión", informa su fundadora. Añade que en diciembre de ese año llegaron desde Diemen, Utrecht y Zaandam las primeras siete casas transportadas por remolcadores y después fueron ancladas al muelle.

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Sostenible en ecología y en vida social

"Hemos formado grupos de trabajo para investigar e implementar temas como la movilidad, la comunicación y la selección de materiales de construcción, y compartimos con otros nuestras ideas, conocimientos y experiencias sociales y de sostenibilidad, para mejorar todos en estas áreas", informa su autora.

Destacan también que la colonia no solo es sostenible en un sentido ecológico, "sino también social" y apunta que los integrantes de esta comunidad planifican desarrollar algunas actividades de forma comunitaria, como la compra de alimentos, con la intención de minimizar los desperdicios y el transporte, apoyando además a los agricultores orgánicos locales y compartir de manera eficiente los espacios de estacionamiento y los automóviles en beneficio de la comunidad.

Otra ventaja de un vecindario sobre el agua es que sus casas se pueden fabricar en otros lugares y después remolcarse hacia su destino, lo que evita que su construcción produzca molestias en los habitantes de los edificios de su área circundante, mencionan.