Comenzar a pensar en adoptar a una mascota puede ser muy lindo, ya que tendrás un amigo que sin duda te querrá mucho y con el que pasarás momentos increíbles. Pero en realidad esto implica muchas cosas, pues te estás responsabilizando por la vida y el cuidado de un ser vivo, por lo que debes considerar ciertos artículos antes de su llegada a tu hogar.

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Alimentación

Lo primero es saber su tamaño o edad, pues de esto dependerá la cantidad de porciones de comida que tendrá al día. Para esto debes destinar un presupuesto mensual para su alimentación, así como acondicionar un espacio en tu casa donde instales su comedero y bebedero.

Busca aquellos que son de acero inoxidable o de cerámica, pues al tener una base pesada será difícil que tú o tu perro lo volteen por accidente. Además de que al ser de otro material que no sea de plástico, éstos no terminarán siendo juguetes masticables.

Seguridad

Depende mucho del espacio donde permanecerá más tiempo tu mascota. En caso de contar con jardín, puedes optar por establecer la mayoría de sus pertenencias en el exterior. Pero si éste no es tu caso debes cuidar cada habitación donde esté, ya que si tu casa cuenta con un segundo piso y tu mascota es muy pequeña, es probable que sufra un accidente.

Para evitar esto te recomendamos instalar vallas en las escaleras, balcones y cisternas, pues es normal que al ser un espacio desconocido para tu cachorro, éste se llene de curiosidad y empiece a inspeccionar el área, logrando la mayoría de las veces meterte uno que otro susto por el miedo a que se caiga y se lastime, o por alguna cosa que rompa.

Esto te ahorrará el trabajo de mantenerlo vigilado e incluso las puedes utilizar en tu mobiliario, todo para mantener el orden dentro de tu hogar.

Transporte

Es posible que al adoptarlo te hayan dado una jaula para trasladarlo o simplemente necesites una para que te acompañe a otro lugar. Antes de adquirirla, procura revisar que tu mascota pueda moverse cómodamente dentro de ella y sea lo suficientemente grande para él. Ésta no sólo te puede ayudar con el viaje de tu mascota, sino que además puede servirte de apoyo a la hora de entrenarlo en cuestiones del lugar donde puede o no hacer sus necesidades.

Esto funciona, ya que los perros odian hacer sus necesidades en su propia cama, por lo que una jaula ayuda a enseñarle a controlar sus evacuaciones en las primeras semanas, justo cuando se está adaptando a su nueva rutina. Durante este proceso intenta que tu cachorro duerma en ella y déjalo salir por intervalos adecuados; con esto notarás que no hará sus necesidades donde sea, sino donde le indiques.