¿Cómo surgió el ecoturismo?

Alrededor del mundo hay sinfín de turistas que realizan esta práctica, descubre cómo surgió y por qué.

Desde hace años, el ecoturismo o turismo ecológico representa una alternativa para un desarrollo sostenible y la defensa de la cultura en México y el resto de países.

Esta actividad tiende a brindar diversión, pero con la condición de respetar el entorno que visitemos y los habitantes que cuiden de éste. Es una forma de preservar las tradiciones, conservar las selvas, los ríos y restos arqueológicos intactos y propiciar la reproducción de vida silvestre.

En la década de los 80, cuando los científicos observaron el impacto ambiental que dejaba el ser humano, por lo que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) elaboró el informe “Comisión Mundial sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo”, donde exhorta a 21 países a tomar cartas en el asunto y proponer el desarrollo sostenible para evitar más repercusiones a la naturaleza.

Sin embargo, no fue hasta 2002 cuando la ONU, luego de la Cumbre Mundial de Ecoturismo en Quebec (Canadá) impulsó las políticas y planificaciones de dicha actividad.

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En México existen innumerables sitios para disfrutar el ecoturismo, desde las montañas que integran la Sierra de Chihuahua, con sus aldeas tarahumaras y vistas impresionantes, hasta las selvas tropicales de la península yucateca, que ofrecen experiencias inolvidables.

Diferencias con turismo natural

Visitar una zona natural no siempre es considerado ecoturismo; es decir, ir a la playa, acampar y pescar no siempre siguen los lineamientos de los que se considera ecoturismo.

Aunque el turismo ecológico no tiene un significado establecido por un organismo mundial, hace referencia a los principios del desarrollo sostenible. Por ejemplo, ir a un río no fomenta la cultura de la localidad y la irresponsabilidad de las personas pueden contaminarlo, en lugar de preservarlo.

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