Conoce las diferencias entre ollas
Saber para qué sirve cada utensilio en nuestra cocina nos ayuda a elaborar platillos de manera más sencilla.
El arte de la cocina es muy compleja y extensa que sólo muy pocos se atreven a adentrarse, y es hasta ese momento donde el resultado que se obtiene son las obras de arte para el paladar que llegan a crear. Pero para todo esto se necesitan diferentes herramientas, desde cuchillos, tablas, cacerolas y ollas, y de éstas últimas hay diferentes variantes, desde las de hierro, a presión, o de cocción lenta. Pero para la gente que no está muy familiarizada con sus diferencias, las vamos a comentar.
Olla de hierro
Este tipo de ollas, que igual son conocidas como horno holandés, están hechas a base de hierro fundido, y en algunos casos presentan recubrimientos de cerámica. Todo esto es para realizar una cocción a fuego lento de la comida, garantizándote un sabor potencializado y ablandamiento de las fibras de los mismos alimentos. Es decir, son la base para las ollas de presión y las de cocción lenta. Las ventajas de las ollas de hierro, es que el fuego llega de manera uniforme. Sirven para hacer estofados, freír, saltear, hacer pan, sopas, hornear y hasta para pizzas. Las desventajas son que deberás estar presente en todo momento para que no se peguen las cosas, el tiempo de cocina se eleva y requieren de cuidado especial. También lee: Opciones deliciosas para cocinar pollo
Olla de presión
Un instrumento de cocción bastante conocido en la cocina, pero que igual presenta ciertos riesgo a la hora de usarse. Como su nombre lo indica, es una olla que se cierra a base de presión, esto hace crear un ambiente por dentro, que sella todo el vapor, los jugos y el aroma de los alimentos, por lo mismo, el tiempo de cocina se reducirá bastante a comparación de otros. Esta olla presenta ciertas ventajas, como es el poco líquido que necesitarás usar, reduce el tiempo y el método de cocción del instrumento potencializará el sabor de los alimentos. De igual manera hay ciertas desventajas con ellas, solo se podrán usar en una estufa, tu presencia será aún mayor que con la de hierro, puesto que tendrás que vigilar que la presión no aumente de más, deberás tener mucha precaución al abrirlas, una vez que la temperatura suba, no podrás abrirla por seguridad.
Cocción lenta
Quizá es una versión moderna de las dos anteriores, pero con sus variantes. A pesar de que los tiempos de cocción se reducen bastante, el término de los alimentos va a cambiar bastante y del sabor ni se diga, sin embargo, es de gran utilidad para las personas con poco tiempo y una vida ajetreada. A pesar de que su nombre indica que son lentas, es todo lo contrario. Las ventajas de estos instrumentos, es que no tendrás que estar presente como en las anteriores, basta con programarlas, cocinan a una temperatura muy baja, que es imposible que se quemen las cosas, son ideales para cortes de carne bastante grandes, además de que el precio es bastante bajo. Pero como en todo, hay inconvenientes, el de ellas es que el sabor no será el mismo, el calor no es uniforme y no resaltará el sabor de los alimentos como quisieras. |