Conoce la terminología para una cata

Una cata del vino es una experiencia de lo más agradable y un entrenamiento para los sentidos, pues los hace más agudos y receptivos.

 

Cuando se asiste a una cata de vinos, es muy común ver diferentes tipos de esta bebida acompañadas con muestras de queso o pan para hacer un maridaje; en estos eventos también se aprovecha para adquirir botellas a un precio menor que el que sale a la venta para el público en general. De igual manera se realizan talleres y pláticas acerca del vino y sus propiedades, sin embargo, en muchas ocasiones no se llega a comprender del todo, debido a la terminología que se utiliza, por ello, te vamos a informar más sobre esto.

 

Primera etapa: fase visual

 

Cuando se asiste a una cata de vinos, existirán tres fases a seguir, la primera es donde se observará el vino en la copa, y para poder ver el mejor color de la bebida, es necesario que se incline la copa de lado. Una vez hecho esto, los sumilleres hablarán sobre la limpieza o transparencia del mismo, es decir, que el vino no presente algún tipo de suciedad o partículas que pueden ensuciarlo y sea transparente. De igual manera se escuchará la brillantez, aquella donde el vino reflejará luz. Otro término más es el matiz, el cual indicará la evolución del vino o su edad. Durante esta etapa, se oye un término más, y se trata de la fluidez o viscosidad, y ésta se refiere a cuando se le gira la copa, el rastro de gotas o lágrimas que deja y la velocidad conforme descienden.

 

Segunda etapa: olfativa

 

En esta sección de la cata de vinos, los sumilleres les pedirán que olfateen el vino para poder captar ciertas características, los asistentes escucharán hablar de los aromas de la bebida, y esto se refiere a la uva, a las notas que llega a desprender, si son dulces, a madera, flores o especias. Sin embargo, también está la parte mala, el término olor, lo utilizan para denotar alguna característica mala del vino. Esa es la diferencia entre uno y otro término.

 

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Tercera fase: gustativa

 

Una de las secciones preferidas del público y por lo que muchas personas asisten, es para hacer el deguste de las bebidas alcohólicas. En primer lugar, se les indicará que prueben la bebida a un solo y pequeño sorbo, una vez dentro, moverlo con la lengua para desprender sus sabores básicos: dulce, amargo, ácido, salado o umani. Una vez concluido este proceso de degustar, los sumilleres hablarán sobre la persistencia, que es un término utilizado para denominar la duración y calidad del vino dentro de la boca y después de haberlo ingerido, es decir, ese sabor que queda unos segundos después de consumirse. Algo así como la fijación de un perfume de calidad a uno de imitación.

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