Síndrome de visión informática
Esta enfermedad es consecuencia del uso constante de computadoras, celulares y otros dispositivos móviles.
Con el paso de los años, en nuestra rutina diaria hemos formado hábitos buenos y malos, estos últimos a largo plazo, pueden derivar en problemas para nuestra salud. En el caso de leer con poca luz, pasar largos periodos de tiempo frente a pantallas luminosas, la falta de lentes adecuados que se adapten a constantes cambios de iluminación y las posturas incorrectas pueden ocasionarnos complicaciones para nuestra visión tales como el "síndrome de visión informática". Probablemente hayas escuchado de el y si no es así aquí te contamos todo sobre este padecimiento. Síntomas Los síntomas del síndrome de visión informática pueden variar de una persona a otra, pero generalmente están asociados a: irritación ocular, sensación de cuerpo extraño, visión borrosa, dolor de cabeza, cuello y espalda, dificultad para enfocar y vista cansada. Esto sucede al pasar muchas horas de ocio frente a distintos tipos de pantallas, como computadoras, tablets, televisores, celulares y otros dispositivos móviles, donde los ojos tienen que forzar su capacidad de enfoque y trabajo binocular que, a la larga, provoca alteraciones visuales por la demanda que se exige. Además, al mirar estos dispositivos electrónicos la frecuencia de parpadeo disminuye un 30 por ciento de lo usual, causando irritabilidad y sequedad en el ojo. También lee: ¿Qué papel tienen los nutriólogos con pacientes diabéticos ante el Covid-19?Recomendaciones En la actualidad es muy poco probable que algunas personas decidan dejar de utilizar algunos dispositivos, sin embargo, si es posible reducir su uso para disminuir los síntomas antes presentados. Lo que se debe hacer es lo siguiente: Mantener una buena postura y distancia frente al monitor de la PC, la televisión, y otros dispositivos móviles. Reducir la luminosidad de los mismos al mínimo posible. Frente a cualquier tipo de pantalla descansar la vista cada 40 minutos de uso, durante 5 minutos, fijando la mirada al punto más lejano posible y pestañee para hidratar los ojos. Considerar el uso de lentes fotosensibles, que se adaptan automáticamente a las diferentes condiciones de iluminación, mejorando el contraste visual en ambientes muy iluminados y ofreciendo una nitidez y claridad de visión al ser adaptables a los diferentes estilos de vida de cada persona. Evitar frotar los ojos con las manos sucias. Emplear siempre buenas condiciones de iluminación, tanto en el hogar como en el trabajo. Conservar limpia la pantalla del monitor para facilitar la lectura y evite reflejos de otras fuentes de luz.
Asistir a su médico oftalmólogo por lo menos una vez al año, para que realice una evaluación y pueda determinar las recomendaciones apropiadas. |