La Secretaría de Educación Pública (SEP) dejó un pasivo por 426.6 millones de pesos al cierre del año pasado, para un total de 182 acreedores.

Según se detalló en el anexo II.8 correspondiente a "Documentos y cuentas por pagar", la deuda más alta se registró a favor de "acreedores de nómina", a los que correspondían 107.4 millones de pesos.

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En segundo lugar se ubicó la cuenta pendiente de las aportaciones del ISR, con un total de 74.2 millones de pesos, provenientes de las retenciones hechas a los sueldos de los maestros y personal administrativo.

Por concepto de traspaso de recursos de gratificación, en favor de los (Centros de Capacitación para el Trabajo (Cecatys) 2018, se adeudaba un total de 51 millones de pesos.

También se observó una cuenta por pagar por concepto de prestaciones a favor del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores de los Poderes al Servicio del Estado de Puebla (ISSSTEP), por 43.6 millones de pesos.

A esa misma institución de seguridad social, donde la mayoría de los derechohabientes son maestros, se le debían 28.4 millones de pesos de un programa de apoyo, del que el documento de referencia no reportó detalles.

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Para la amortización de préstamos se tenía pendiente cubrir un pago de 13.4 millones de pesos.

La SEP informó que al cierre de 2018 también mantenía una cuenta por saldar del Programa de Fortalecimiento de la Calidad Educativa por 9 millones de pesos, y de 7.7 millones de pesos correspondientes al Programa Nacional de Inglés.

En la lista de los 182 acreedores hay otras cuentas que oscilan entre 1.2 y 6.5 millones de pesos por conceptos variados, como Sueldos por Pagar, Crédito Hipotecario al ISSSTEP, Seguro de Vida Adicional y a la razón social Edilar SA de CV.

Igualmente se detectaron cerca de 120 adeudos menores al millón de pesos, de acuerdo con los datos oficiales.