Blanca TORRES Corresponsal Con el fin de evitar abusos a los usuarios de servicios financieros, la Comisión Nacional para la Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros buscará regular los despachos privados de cobranza, ello como parte de las modificaciones que se presentan con la reforma financiera. José Luis Cardoza de la Vega, delegado de la Condusef en Tlaxcala, explicó que la dependencia podrá tener participación en la regulación de los despachos privados de cobranza, con el fin de evitar abusos al momento de adquirir la cartera vencida de alguna institución financiera. “De acuerdo a las reformas del sector financiero todo continúa como se ha venido manejando hasta la fecha aquellas personas que mediante el manejo de tarjeta de crédito o algunos problemas de tarjeta de débito por algunos créditos de nómina o créditos personales se van a seguir manejando como los manejan las instituciones con contratos privados de venta de cartera, aquí lo importante es mencionar que cuando estos créditos se cedan a instituciones privadas para su cobranza la Condusef va a poder intervenir” explicó. Indicó que para el mes de abril se darán a conocer las reglas de operación bajo las que se regirán este tipo de despachos y con lo que se espera evitar prácticas abusivas. “Deberán de cesar los procedimientos que se están llevando a cabo hasta el momento, los cuales en algunos casos son muy molestos, tal es el caso de los llamados telefónicos los fines de semana en horas que ya no son prácticas, de igual forma no deberán utilizar palabras altisonantes, el hecho de que te peguen algunos recados donde señalan que este cliente no paga; todo estos ejemplos van a regularizarse” aseguró. El funcionario señaló que se hará un estudio para poder emitir una lista de los despachos de cobranza que se encuentren debidamente reglamentados. De igual manera dijo que las instituciones bancarias solicitarán garantías sólidas y libres de gravamen para otorgar créditos o préstamos. Finalmente, recalcó que la falta de pago no se podrá tipificar como un delito hasta que el cliente deje de pagar por completo el crédito, además de tener una repercusión en la calificación de crédito.