DE FRENTE Y DE PERFIL
RAMÓN ZURITA SAHAGÚN
Marcelo el previsor
Marcelo Ebrard Casaubon busca abogado, experto en litigios contra el gobierno, con un buen despacho, pero eso sí, que cobre poco.
Consciente de que sus argumentos de defensa sobre la L12 no han sido lo suficientemente sólidos para evadir responsabilidades sobre sus deficiencias, Marcelo Ebrard Casaubon se prepara para su defensa legal.
El ex Jefe de Gobierno ya recibió la oportunidad de rebatir los resultados de la investigación realizada por la comisión especial que sobre el tema se creó en la Cámara de Diputados.
Fue y expuso sus razonamientos y negó todo tipo de imputaciones hacia su persona, al igual que lo hizo el senador Mario Delgado Carrillo, quien actuara como secretario de Finanzas del gobierno capitalino que encabezó Marcelo.
El recorrido mediático realizado por el ex jefe de Gobierno tampoco ha tenido el resultado esperado y su pretensión de una candidatura a diputado federal plurinominal se encuentra en vilo.
Marcelo sabe que de prosperar una denuncia penal en su contra, su futuro político rodaría por el suelo y sus sueños de convertirse en candidato presidencial se esfumarían.
El ex Jefe de Gobierno intenta convencer a quienes lo escuchan que se trata de una cuestión política y culpa a los priistas de ejercerla en su contra, aunque no aclara el porqué
El avance de las investigaciones advierte un futuro difícil para quien aspiró hace tres años a convertirse en candidato presidencial y se hizo de lado, dejando el campo abierto para una nueva incursión de Andrés Manuel López Obrador.
Las aspiraciones de Marcelo se mantienen hacia el 2018 en que busca competir por la candidatura presidencial de la izquierda, aunque sabe que ahora tendrá otros contendientes y que Andrés Manuel se consolida como el candidato del Movimiento de Regeneración Nacional.
De ahí que sea tan importantes los dos aspectos, el de quedar liberado de los señalamientos que se la hacen como responsable de los desperfectos de la L12 y que el PRD lo incluya en la lista de sus candidatos a diputados federales plurinominales.
Por ello Marcelo se mantuvo en la filas del partido de la Revolución Democrática, aunque coqueteó con dar el brinco al Movimiento Ciudadano, Nueva Alianza y hasta a MORENA.
Sin embargo, el asunto de la L12 lo mantiene con insomnio, por lo que busca afanosamente la puerta de salida de este escándalo que rebasa la imaginación sobre el monto millonario de las pérdidas provocadas por una mala planeación de la obra.
Por eso, se ve a Marcelo buscar a prominentes políticos, pero al mismo tiempo a abogados consistentes, para planear sus estrategias de alianzas políticas y de defensa legal.
Marcelo empezó el lunes su jornada muy temprano, reuniéndose con los abogados José Elías Romero Apis y Juan Carlos Sánchez Magallán, a quienes les llevó el voluminoso expediente que carga siempre con él sobre el tema de la L12.
Romero Apis y Sánchez Magallán cuentan con un experimentado y sólido despacho de abogados.
El curriculum de Romero Apis es amplio y destaca entre otros cargos en el servicio público Director General de Asuntos Especiales (SHCP), Coordinador Nacional de Conciliación y Arbitraje (STPS), Diputado Federal y Presidente de la Comisión de Justicia y, en siete ocasiones, Subprocurador de la República y del Distrito Federal.
