A poco más de cien días de la administración de Trump es importante hacer memoria
Han transcurrido poco más de cien días de la administración de Donald Trump como presidente de Estados Unidos (EUA) y aquellas hipótesis realizadas por los especialistas sobre el cambio de hegemonía de EUA hacia China, el fin del dominio del dólar en el sistema monetario internacional y el afianzamiento del liderazgo de China en el comercio internacional aún están por resolverse.
Sin duda la salida de EUA del Acuerdo Comercial Transpacífico (TPP) y del Acuerdo de París (en materia de desarrollo sustentable); los sucesos recientes en Venezuela y la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea o Brexit, son importantes en la discusión sobre el futuro desarrollo económico de EUA y sus efectos en el sistema económico mundial, no obstante, el análisis de un par de sucesos económicos trascendentales en la primera década del siglo XXI ocurridos en EUA, también contribuye, como lo describiremos en esta columna, a construir una serie de argumentos que pueden fortalecer o bien debilitar las hipótesis referidas al principio.
Después de la crisis sistémica de 2008, referida como la crisis financiera inmobiliaria o hipotecaria que estalló con el anuncio de quiebra de American Home Mortgage el 6 de agosto de 2007, el debate y el número de estudios sobre la debacle de la hegemonía de EUA y el fin del neoliberalismo comenzaron a ocupar los titulares de numerosos textos académicos y mesas de debate en los medios de comunicación.
En primer lugar, la citada crisis cuestionó la eficacia del libre mercado y la autorregulación de los mercados, particularmente, en el sector financiero, que al estar frágilmente desregulado y liberalizado condujo a una crisis de alcance global en EUA a través de la titularización de activos de alto riesgo. De hecho, el 21 de julio de 2010, Barack Obama aprobó la Reforma Financiera constituida en el Dodd-Frank Wall Street Reform and Consumer Protection Act, la cual estableció una normatividad para potenciar la sostenibilidad del sistema financiero estadounidense. Asimismo, la disciplina fiscal y el control sobre la deuda pública estuvieron entre las tesis neoliberales a debatir durante la administración de la crisis. Por ejemplo, en marzo de 2008 el fondo de inversión: Bear Sterns, vinculado con títulos de hipotecas fue rescatado por el gobierno estadounidense. Y con ello una cláusula contable operativa aparentemente olvidada se puso en marcha: las hojas de balance del sector privado son compensadas por el déficit público.
En segundo lugar, la pérdida de hegemonía de EUA es una hipótesis que ha concitado importantes disertaciones. Están aquellas que afirman la continuidad de la hegemonía de EUA, las que desplazan dicha hegemonía a China y las que visualizan un mundo multipolar. Cualquiera de los tres escenarios debe considerar la relación estratégica que EUA ha desarrollado en los últimos treinta años con China y el proceso de capitalización externa que opera el país vecino del norte a través de la internacionalización de los procesos de producción (tema del que me ocuparé en nuestra siguiente columna). Por el momento, apunto que en 2009, China mantuvo una posición importante en la cumbre del G-20 en Londres anunciando que una opción favorable sería crear una "moneda global" controlada por el Fondo Monetario Internacional. Sin embargo, China decidió conservar el status quo del sistema financiero y monetario internacional con la hegemonía del dólar relativamente consensada por los gobiernos de las principales potencias económicas desde Bretton Woods (1944). De hecho, China contribuye sobre manera a la operación económica de EUA a través del financiamiento a su deuda pública mediante la adquisición de instrumentos de crédito administrados por el Departamento del Tesoro.
Así, la historia nos muestra puntos coyunturales críticos en los que los pronósticos sobre EUA no han sido positivos, sin embargo, es claro que este país ha desarrollado mecanismos para administrar las crisis. Por lo tanto, es importante hacer memoria para una conveniente y mesurada prospectiva sobre la evolución e interconexión entre EUA y las economías nacionales occidentales y orientales.
