Constantemente nos estamos transformando como individuos y personas, por supuesto que prevalecen muchos aspectos que nos hacen ser nosotros mismos durante el tiempo, pero sin duda también, todo el tiempo estamos cambiando y adaptándonos, quizás a una escala mínima e imperceptible… pero al fin de cuentas cambiando, lo anterior, es lo que ha hecho que como especie podamos sobrevivir, tenemos la capacidad adaptarnos al entorno, e incluso ir más allá y adaptar el entorno a nosotros…. quizás como consecuencia de nuestra inteligencia (individual o colectiva) o quizás como un mismo balance dentro de un sistema que poco comprendemos… entre cambio y mantenimiento del status quo.

Esta característica innata a nuestra biología, a nuestra psique y a nuestro comportamiento es algo que impregnamos en todo lo que hacemos, puesto que es parte de nosotros. Se habla por ejemplo de etapas o ciclos de vida de productos, de madurez del mercado, de las tecnologías y hasta existen modelos para las empresas… algo común y normal y que a veces nos cuesta asimilar, a pesar de que es lo natural… el default por decirlo de una manera puntual, es cambiar… y resistirse a cambiar… por un lado, somos cambio en sí mismo… y por otro lado somos seres de hábitos y costumbres… y esto genera conflicto.

Algo que también perdemos de vista es que los conflictos son el mejor caldo de cultivo para generar nuevas oportunidades, aprendizajes y crecimiento. Usualmente nos enfocamos en la parte negativa, en la parte en la que no nos sentimos cómodos o en la que solo vemos como todo puede salir mal; pero el conflicto y las crisis son el mejor estimulante para innovar, para sacar a flote el carácter y la resiliencia, y toda la energía creativa que nos caracteriza como humanos…

Así como lo anterior se puede interpretar a nivel personal, también se puede transpolar a la parte organizacional, puesto que también se encuentran en constante cambio todo el tiempo, a pesar de que no sean conscientes de tal transformación, y además de que por diseño generen mecanismos como las estructuras y procesos para tratar de mantener el estatus quo... Esto tiene diversas teorías y explicaciones, ya que el control está en el ADN organizacional y controlar es más sencillo bajo condiciones quietas, sin movimiento, estáticas….

Sin duda esta dualidad entre el cambio y el no cambio es un gran obstáculo, pero a la vez impulsor de ciertos contextos (como las crisis) que son indispensables para transformarnos, para crecer… el cambio duele sin duda… pero necesitamos salir fortalecidos…

*Director del Departamento de Gestión y Liderazgo, Región Sur

Escuela de Negocios del Tecnológico de Monterrey en Puebla

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@JorgeAOT

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