Muchas mamás me han comentado que sus hijos tienen problemas con la comida, la vez pasada hice un artículo sobre comida atractiva y rica para ellos, pero esta vez me referiré a qué hacer para que los niños coman. Cabe mencionar que todos los niños tienen una etapa en la que la comida no es del todo rica ni del todo llamativa, prefieren jugar en lugar de comer, es normal, pero aún así deben de hacer algunas comidas fuertes como el desayuno o la cena, o su lunch.

¿Qué se puede hacer si un niño apenas prueba la comida y es más pequeño que los niños de su edad?, ¿puede ser que sufra algún trastorno?, ¿si pesa menos que los demás niños de su misma edad, significa que no come lo suficiente?.

Estas preguntas son de las más frecuentes, sin embargo, les puedo decir que no hay mayor preocupación, cada niño tiene su ritmo recuerden y existen muchos factores que hay que tener en cuenta.

Uno de ellos y muy importante son los factores hereditarios y costumbres, el crecimiento y aumento de peso depende de lo que el niño come, aunque la altura depende de mecanismos genéticos.

Otro punto importante es el hecho de que un niño sea más o menos regordete también depende de sus costumbres.

Si se fijan depende mucho de cómo sean en casa, aunque repito no todo queremos comer a cuándo nos toca el juego porque estamos tan entretenidos y creemos que se nos puede terminar el juego.

Cuándo conviene realizar exámenes. Cuando el peso se aleja mucho de los nuevos valores en las tablas del pediatra. En estos casos, el médico investigará si el niño puede tener problemas de mala absorción que puedan retrasar el crecimiento. También puede ser que tenga alguna infección urinaria.

Es importante, como consejo te lo digo, el revisar que hace tu hijo antes de comer, si tu hijo está muy contento y lo quitas del juego, seguramente llorará y no querrá comer adecuadamente porque está muy enojado, pero si tu hijo está normal y lo sientas a comer su platillo favorito, seguramente lo hará muy bien.

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