Nishiyama Onsen
Sin lugar a dudas, la cultura empresarial occidental puede aprender mucho de entidades milenarias como Nishiyama Onsen
¿Sabes cuál es la empresa que más tiempo ha existido en el mundo? Nishiyama Onsen, un hotel en Japón. ¿Cuántos años crees que tiene de existir? Piensa un número. Lo más probable es que el número que pensaste se quede corto, ya que estamos acostumbrados a recibir mensajes de empresas que presumen sus 20, 50 o hasta 100 años de antigüedad. Inclusive, algunas referencias empresariales longevas, son General Electric y sus 128 años, Barclays, con 330 o Dupont, con 218. Si pensamos en empresas icónicas mexicanas llegaríamos a Casa Cuervo (225 años), Herdez (206) o Liverpool (173). Nishiyama Onsen se sale de cualquier parámetro al contar con 1,316 años. Recibió a su primer cliente 88 años antes de la invasión vikinga a Bretaña y 600 años antes de que los Aztecas vieran el águila devorando la serpiente en Texcoco. Su historia es exquisita: fue concebida como una pequeña posada familiar con acceso a fuentes termales ubicadas en las faldas del Monte Fuji, siendo su fundador Fujiwara Mahito. Desde entonces ha recibido grandes figuras que incluyen a Tokugawa Ieyasu, emperador unificador de Japón. La empresa es familiar y ha sobrevivido durante 52 generaciones. Reconocidos gurús americanos, como Jim Collins, por ejemplo; escriben continuamente sobre empresas que perduran. Sin embargo es difícil encontrar referencias sobre esta empresa japonesa, siendo que sobresale notoriamente de los típicos ejemplos como: Apple, Gillete, Southwest Airlines, 3M, Disney, etc, utilizados una y otra vez por estos autores. Entonces ¿Qué podemos aprender de Nishiyama Onsen para llevarlo a nuestras empresas o a nuestra vida? Analizando un poco, encontré estas 4 interesantes características: Misión sostenible. “Ser uno con la naturaleza”, es el propósito declarado. Sus aguas termales, su localización en medio de una hermosísima naturaleza, y su cuidadoso diseño y decoración amigable con su entorno, lo colocan en una posición única. No hay grandes amenidades, pero para los que buscan tradición y naturaleza, este lugar es muy difícil de superar. No importa en que país vivas o en cuál época; “ser uno con la naturaleza”, es una misión que ofrece un beneficio que siempre tendrá mercado. ¿Tu misión podría permanecer por mil años? Diferenciación, no todo es tecnología. Nishiyama Onsen no tiene Wifi. Un valor básico del hotel es la tradición. Si tienen una antigüedad de 1,316 años, ¿quién puede vencerlos en este rubro? Sostienen que la experiencia en sus alojamientos debe ser completamente japonesa; así que mobiliario, decoración, alimentación y reglas de comportamiento van en sintonía directa a esta cultura. Tal vez en el futuro los huéspedes lleguen en vehículos voladores a la puerta del hotel pero, entrando, a apagar celulares. Servicio. Así como recibieron al emperador Ieyasu hace siglos, de la misma manera atienden a cada visitante: con un trato digno de rey. Humildad. Hay dos elementos que he decido juntar en un solo punto ya que ambos tienen como fundamento la humildad. a) El hotel tiene sólo 37 cuartos. Tiene esa cantidad desde hace cientos de años, y no parece que aspiren a tener más. En occidente pensamos que si has dejado de expander, tu empresa es un fracaso (de hecho yo lo diría.. así se llama mi columna), pero los dueños de este hotel piensan diferente. Su poderoso (y humilde) enfoque a servir diligentemente a cada huésped se contrapone a su expansión. Aún así, su longeva historia es prueba de su éxito. b). Modelo de herencia. Durante los 52 cambios generacionales en la administración del hotel, lo natural y común es que el dueño en turno lo herede a sus hijos. Sin embargo, si en algún momento no hay hijos o éstos no son adecuados para dirigir el negocio, el dueño en turno “adopta” a un empleado competente. Así se asegura que el negocio quede “en familia”, pero a la vez en manos capaces de continuar con su importante legado. Debemos aprender que primero es la empresa, para que siga generando valor a la sociedad, antes que los paradigmas tradicionales. Sin lugar a dudas, la cultura empresarial occidental puede aprender mucho de entidades milenarias como ésta. Esperemos que dentro de 684 años, Nishiyama Onsen celebre sus primeros 2,000 años de vida.
www.salexperts.com Facebook: @Salexperts, @ACAldrete.
Linkedin: Alberto Cárdenas Aldrete |
Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de El Popular, periodismo con causa. |