“Si siempre intentas ser normal, jamás podrás descubrir cuán maravilloso podrías ser” -Maya Angelou 

Según datos oficiales, al día de hoy existen más de 548.933 hoteles en el mundo. La oferta de alojamientos es amplísima y muy variada. Por lo tanto, son muchos los factores que inciden a la hora de ganar reconocimiento internacional. Sin embargo, existen algunos establecimientos que se destacan más allá de la comodidad, el precio, o la ubicación, y rompen los límites de la imaginación.

De esta forma, con el paso de los años cada vez más hoteles se han lanzado a la aventura de construir un alojamiento original y llamativo. Es decir, un lugar que sorprenda al viajero por su concepto y su forma.

Los hoteles inusuales los encontramos en todos los continentes. Ya sea en América, como el hotel Costa Verde, ubicado en Costa Rica, es un avión Boeing 727 suspendido en medio del paisaje selvático con habitaciones amplias que te harán pasar una experiencia única. O en un hotel construido a base de sal, como el  Palacio de Sal ubicado en Salar de Uyuni, Bolivia. El Hotel cuenta con 15 habitaciones hechas enteramente de sal.

Examiné más de cerca el verdadero aspecto del edificio. Su rasgo dominante parecía ser una excesiva antigüedad. Grande era la decoloración producida por el tiempo. Menudos hongos se extendían por toda la superficie, suspendidos desde el alero en una fina y enmarañada tela de araña. Pero esto nada tenía que ver con ninguna forma de destrucción. No había caído parte alguna de la mampostería, y parecía haber una extraña incongruencia entre la perfecta adaptación de las partes y la disgregación de cada piedra. Esto me recordaba mucho la aparente integridad de ciertos maderajes que se han podrido largo tiempo en alguna cripta descuidada, sin que intervenga el soplo del aire exterior. Aparte de este indicio de ruina general la fábrica daba pocas señales de inestabilidad. Quizá el ojo de un observador minucioso hubiera podido descubrir una fisura apenas perceptible que, extendiéndose desde el tejado del edificio, en el frente, se abría camino pared abajo, en zig-zag, hasta perderse en las sombrías aguas de un estanque cercano.

En Europa también cuentan con diversas temáticas, tal es el caso del Ice Hotel, ubicado a 200 kilómetros del Círculo Polar Ártico, se destaca por ser el hotel más grande del mundo hecho de nieve y hielo, su principal atractivo es que todo el edificio se derrite y se reconstruye cada año. En el antiguo puerto de Stavoren, Holanda, captura todas las miradas el Hotel de Vroowe van Stavoren. Los dueños tuvieron la creativa idea de remodelar barriles de vino de 14.500 litros y transformarlos en cuatro habitaciones para dos personas con comodidades estándar. Luego sumaron otras ocho barricas de 23.000 litros con accesorios de lujos, como jacuzzi, sauna y ducha escocesa. 

Por otro lado, en la ciudad de Nairobi se encuentra la propiedad insignia de la cadena The Safari Collection. Tal como su nombre lo indica, en esta casa de campo las estrellas son las jirafas. Así que si visitas este hotel no te extrañes que pueda estar desayunando con las jirafas.

Así que si estás buscando conocer diferentes destinos y hoteles totalmente fuera de lo convencional, sugiero que empieces por visitar uno de estos alojamientos y vivir una experiencia inolvidable.

¡Viajemos Juntos!