Con la apertura del Segundo Periodo Ordinario de Sesiones del Segundo Año de la LXV Legislatura del Congreso de la Unión, no claudicaremos en nuestro intento de que las agendas legislativas de mayor interés para las y los mexicanos sean una realidad.

Hoy contamos con la primera Cámara de Diputados totalmente paritaria, ya que por primera vez en la historia de México contamos con 250 diputadas y 250 diputados federales. Esta nueva correlación de fuerzas en el Poder Legislativo nos ánima y también nos compromete a actuar con altura de miras y seguir defendiendo los derechos y libertades de todas la niñas, mujeres y adolescentes.

Para este nuevo Periodo Ordinario de Sesiones, la Comisión de Igualdad de Género, que tengo el honor de presidir, tiene la enorme misión de sacar adelante la Ley Vicaria, cuya finalidad es reconocer en nuestro marco jurídico este delito, al establecer la obligación del Estado a diseñar políticas públicas de prevención, así como los medios necesarios para sancionarla.

Asimismo, existen iniciativas que se encuentran pendientes de dictaminar en otras comisiones como la iniciativa que promoví junto a diputadas de todos los grupos parlamentarios, y que busca tipificar y sancionar los ataques de ácido en contra de las mujeres con hasta 16 años de cárcel.

Esperamos que este mecanismo esté al alcance de las víctimas y nunca más estos hechos queden impunes.

Entre los temas que ya han analizado otras comisiones de la Cámara de Diputados y que están listos para discutirse en el pleno, resalta el dictamen que reforma a la Ley General de Salud en materia de objeción de conciencia, cuyo propósito es atender a la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y establecer límites claros sobre en qué casos y bajo qué criterios el personal médico de salud puede excusarse de prestar algún servicio. Lo anterior deja claro que la objeción de conciencia no es un derecho absoluto, ni ilimitado, sino que se debe garantizar el derecho a la salud de todas las personas.

Finalmente, es importante mencionar que durante todo el año 2022 diputadas de todas las fracciones parlamentarias participamos en la redacción de una reforma constitucional amplia e integral en materia de igualdad sustantiva, misma que busca incorporar la perspectiva de género como eje transversal de las políticas públicas, la igualdad salarial entre mujeres y hombres por trabajo del mismo valor, o la medida 3 de 3 contra la violencia, cuya intención es establecer la obligación de que los candidatos a los cargos federales de elección popular cumplan con el requisito de no haber sido condenados o sancionados por violencia familiar, delitos sexuales o como deudores alimentarios.

Con ello dejaremos claro que ni un agresor llegue al poder, ni a ningún cargo de representación popular.

Estos son solamente algunos de los temas prioritarios que forman parte de la agenda de igualdad sustantiva y que sin duda tendremos que empujar para que sean debatidos y aprobados en el seno de la cámara baja.

No me queda duda que la suma de voluntades y el compromiso de todas y todos los legisladores seguirá sumando para seguir cerrando cada vez más la brecha entre mujeres y hombres.

Desde la Cámara de Diputados seguiremos  impulsado y aprobando reformas fundamentales para garantizar los derechos de las mujeres, la erradicación de la violencia de género y la eliminación de la discriminación motivada por el simple hecho de ser mujeres.

* Presidenta de la Comisión de Igualdad de Género en la Cámara de Diputados