Hoy más que nunca debemos de cerrar filas y promover la unidad en nuestro movimiento, ante la amenaza latente de los poderes fácticos que quieren regresar al Gobierno, para restaurar un régimen de privilegios a costo del dolor de la mayoría de los mexicanos.

Por encima de las aspiraciones políticas, no debemos olvidar cómo los conservadores entregaron el país al mejor postor, sin importar la miseria y desigualdad en el que tenían sumergida a nuestra gran nación.

Tampoco se debe olvidar, ni mucho menos perdonar, el saqueo obsceno del erario con el que auspiciaron sus sueldos millonarios, lujos y excesos.

Cínicamente quieren engañarnos con una falsa sencillez, una supuesta preocupación por el rumbo de México, cuando en sus años gloriosos se les olvidó que nos llevaron al barranco de la destrucción y de la corrupción.

Quieren regresar para consumar la privatización de Petróleos Mexicanos (Pemex), la Comisión Federal de Electricidad (CFE), eliminar los programas sociales y regresar las pensiones a los expresidentes corruptos; como lo tuvieron: un gobierno en poder de unos cuantos.

Es por ello que tenemos la responsabilidad de seguir protegiendo el bienestar de los históricamente olvidados por el Estado.

Es menester poner por encima de todo el interés del pueblo de México, para continuar por la ruta del cambio y seguir consolidando la transformación de nuestra patria, con mejores oportunidades para todos.

Debemos cerrar filas para seguir construyendo una Nación incluyente, en el que todas y todos tengamos acceso a las nuevas oportunidades que traigan consigo las inversiones nacionales y extranjeras.

Que no quepa duda que seguiremos haciendo historia, igual que el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien nos deja su legado basado en el máximo principio de nuestro movimiento: Por el bien de todos primero los pobres. No mentir, no robar y no traicionar al pueblo. 

El viejo régimen oligárquico, ya impuso a quien habrá de defender una vez más el proyecto neoliberal, pero el Movimiento de la Transformación los volverá a derrotar en 2024, porque el pueblo de México es mucha pieza, y no olvida los agravios, las injurias y el saqueo con el que condujeron al Estado mexicano.

Una vez más el país se encuentra en medio de un proceso de transformación que inició en 2018 gracias a la voluntad del pueblo y que sin duda tendrá continuidad en 2024.

En este mes patrio debemos hacer honor, a la lealtad y heroísmo de los líderes que guiaron al pueblo hacia la creación y defensa de una Nación libre y soberana.

Las y los mexicanos somos aguerridos, trabajadores, lo damos todo para construir, fortalecer y mejorar a nuestra sociedad.

Continuaremos con el legado de nuestro presidente, Andrés Manuel López Obrador: “Por el bien de todos primero los pobres”.

En el 2024, volveremos a dejar a los conservadores en el basurero de la historia: ahí se quedarán por muchos lustros más. Larga vida a Morena y a la Cuarta Transformación.