Concluimos el 2023 con la aprobación de enmiendas en la Cámara de Diputados que continúan fortaleciendo los derechos de todas las mujeres del país.

Antes de finalizar el año avalamos la iniciativa, de la cual fui promovente, para reformar y adicionar diversas disposiciones de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, con el objetivo de establecer mecanismos para prevenir y erradicar la discriminación laboral por embarazo.

Con esta enmienda, se considerará discriminación laboral y docente los actos u omisiones en contra de una mujer, en razón del embarazo, ya que vulnera sus derechos a la igualdad, a la maternidad, al embarazo o a la lactancia.

Además, constituye violencia laboral la discriminación, distinción, exclusión o restricción en contra de una mujer solicitante de empleo o empleada, en razón de su maternidad, embarazo o lactancia.

Con esta reforma, se reconocerá a estas mujeres en su calidad de víctimas y se obligará a las instituciones de los tres órdenes de gobierno para que emitan las órdenes de protección necesarias. De esta manera, podrán acceder de manera gratuita a los servicios de atención legal y de salud, incluyendo los servicios de salud mental.

Asimismo, con este proyecto de ley se establece que las 32 entidades federativas deberán de especializar a sus agentes del Ministerio Público y peritos en materia de discriminación cometida por motivos de embarazo, maternidad o lactancia.

La enmienda también faculta a la Secretaría de Trabajo y Previsión Social para realizar las acciones necesarias, a fin de que las autoridades competentes lleven a cabo registros homologados, confiables y desagregados sobre casos de discriminación, permitiendo identificar el tipo de conducta de que se trata, los derechos que se vulneraron y el perfil del agresor.

Gracias a esto, las mujeres trabajadoras tendrán todo el acompañamiento del Estado para que ningún caso quede impune y, sobre todo, para garantizar la no repetición de este tipo de violencia.

Los retos continúan, el 2024 será fundamental para poner fin a las brechas de desigualdad que durante décadas oprimieron a mujeres, niñas y adolescentes.

Un tema de la mayor relevancia es el tema de cuidados no remunerados.

Las mujeres trabajan hasta más de 14 horas a diferencia de los hombres, y hoy permanecemos con esta doble carga de actividades y de trabajos.

Debido a ello, es menester legislar al respecto, ya que millones de mujeres, niñas y adolescentes han tenido que coartar sus sueños, sus deseos, sus anhelos, porque no tienen oportunidad de decidir entre quedarse a seguir haciendo esta carga de labores o poder desarrollarse ellas mismas.

Como presidenta de la Comisión de Igualdad de Género, no claudicaré hasta romper con todos los techos de cristal y fortalecer el marco normativo de protección para los millones de niñas, adolescentes y mujeres del país.

Debemos garantizar que todas y todos tengamos las mismas obligaciones y oportunidades. Sólo así construiremos una sociedad igualitaria sin que nadie se quede atrás.

Julieta Kristal Vences Valencia

Presidenta de la Comisión de Igualdad de Género de la Cámara de Diputados