Mis queridos vecinos y vecinas, da gusto ver a los treintañeros muy activos vacunándose y aunque hay uno que otro “rebelde” que sigue de terco diciendo que no se vacunará, ver a una gran mayoría de jóvenes participativos devuelve la esperanza de que pronto saldremos de ésta.

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En el temido pasillo de los chismes andan diciendo que hay tres mujeres que integrarán el gabinete de Eduardo Rivera en su nueva aventura como alcalde de la capital del estado.

La primera es Silvia Arguello, quien ya ha tenido sus apariciones en la administración pública con las siglas del PRI y de Nueva Alianza. La segunda es Karina Alcalá, quien desde el PRI ha estado trabajando desde hace tiempo y ya conoce los tejes y manejes de la vida política. Si le suena el nombre es porque es hija de la excalcaldesa Blanca Alcalá. La tercera es nada más y nada menos que Augusta Díaz de Rivera, quien lleva años moviéndose en las olas del panismo más empresarial y a quien muchos creen se le queda a deber una candidatura importante en la administración pública.

Así que cantada vale doble. Vamos a ver qué posiciones se repartirán en el multigobierno, pues hay posiciones que se le deben al PRI, al PRD, al PAN y… al gobierno estatal. ¡Chin! ¿Lo pensé o lo escribí?

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Los que andan muy engallados son los ambulantes del Centro Histórico, quienes se hacen notar en el primer cuadro de la ciudad “aprovechando” la presencia de turistas. Quieren demostrar músculo antes del cambio de administración, así que agárrense porque por ahí de octubre se va a ver el carnaval. Eso sí, si el gobernador les deja caer uno que otro operativo para desarticular, a lo mejor soluciona este problema tan complejo. Ya saben que hay quienes piensan que el garrote es el mejor amigo de un negociador.

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El que ya hizo su aparición luego de estar ausente un tiempo tras las elecciones de julio es René Sánchez Galindo, exsecretario de Gobernación de la ciudad de Puebla y excandidato a diputado federal. La aparición no es para menos pues llegó con espada desenvainada a demandar a Agua de Puebla y Soapap por no cumplir con los parámetros establecidos y contaminar los ríos Atoyac y Alseseca.

Con la encomienda federal, Sánchez Galindo se ve fortalecido, vamos a ver si en la administración estatal lo dejan brillar.

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Vecinas, vecinos, nos leemos mañana.