Por La Rascona*

¡Qué tal, vecinos, vecinas! Ya los vi retequedivertidos imitando las patadas de bicicleta de Alfredo Adame, quien parece que se esfuerza por hundirse cada vez más en el pozo de las burlas y el chacoteo. Ya nomás falta que el payaso Bubulín lo zarandee, que Will Smith le meta una cachetada, o que le den una candidatura plurinominal.

Oigan, lo que de plano está de burla es la seguridad en la entidad, pues la violencia no da tregua. Los ejecutados se siguen acumulando, los llamados “ajustes de cuentas” y los asaltos al transporte público andan a la orden del día.

Es en ese clima donde la cantaleta de todos los gobiernos se hace presente, y al son de “vienen de fuera”, “los malos son ellos” y “peleas entre grupos delincuenciales”, no hay estrategia que contenga la violencia. En eso se han equivocado los que gobiernan Puebla. Discursos van, discursos vienen pero la única constante es la inseguridad.

Y es que la violencia que está en todos lados, saca a flote lo peor de las personas, quienes en mucho están influenciados por los discursos de odio que aseguran que “otros” son los malos. Ahí tienen ustedes el caso del linchamiento en Atlixco, donde una turba enardecida golpeó hasta dar muerte y dejar mal herido a dos hondureños que se robaron unos aguacates para comer. El horno no está para bollos y siguen alimentando el día a día con discursos de odio. Mala, malísima estrategia.

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La telenovela que sigue y sigue, y promete varias temporadas más es la del divorcio entre el exauditor y el gobierno del estado. Ahora, en un nuevo capítulo, andan revelando varios “amantes” y varios “complós” para dominar el mundo… o algo así. Fíjense ustedes que el gobernador denunció que las mañas en la Auditoría Superior del Estado se efectuaron gracias a la complicidad de “destacados” priistas. ¡Cómo la ven! Ahora aparecieron nuevos villanos en la trama.

“¿Qué exdiputado local estaba ahí, quién de la dirección estatal del PRI estaba ahí, quién es el gran político priista que definía cosas y quién es el gran socio del políticos priistas? Todos ellos alimentaron una personalidad que se desconcentró, se desbocó y se llevó a tanto. ¡Cuidado con eso!”. Como diría María Victoria: “cuidadito, cuidadito, cuidadito”.

Eso sí, ya hay quienes de una vez se dieron por aludidos y salieron a desmarcarse de las acusaciones. ¡Ah!, pero nuestros vecinos que hacen las veces de chismosos nos comentan que ya andan investigando en la Fiscalía los nexos tricolores que llegan hasta Francisco Romero Serrano. Esto anda poniéndose calientito.

Vecinos, vecinas, nos leemos mañana. Les dejo mi correo por si quieren chismear más a gusto:

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