“Nueva clase política” queda desprotegida

*Por La Rascona 

¡Vecinas y vecinos! Pues no, hoy no hay chacoteo. Desde esta humilde vecindad extendemos nuestras condolencias a familiares y amigos del gobernador Luis Miguel Barbosa, quien falleció ayer martes luego de haber presentado complicaciones cardiacas. Puebla pierde a su gobernador como hace cuatro años y queda la pregunta: ¿qué tanta ingobernabilidad habrá en un estado que no llevaba ya un tiempo sin vivir el mejor de sus momentos en situaciones de seguridad y procuración de justicia? La salud del gobernador siempre fue un punto que más de uno llegó a cuestionar y desde la sede gubernamental se hizo caso omiso a estas preocupaciones. Lo cierto es que desde el gobierno del estado, donde se supone debería haber un consenso por no desinformar, se emitieron comunicados y descalificaciones para quienes aseguraban que el mandatario se encontraba en una situación crítica de salud. Fue el Presidente de la República quien dio la noticia. Se replicó de manera unánime, incluso por quienes minutos antes se burlaban de los cuestionamientos y aseguraban que habría cuarto informe de gobierno. Se equivocaron. Fallaron. Nos fallaron. La forma de entender y vivir la política de Miguel Barbosa fue peculiar. Y lo era así desde su militancia en el PRD. Nada ni nadie lo iba a cambiar. Supo moldear un juego dentro del tablero de su propia sucesión. Apostó por varios. “Corcholatas”, les decíamos. “Nueva clase política”, les decía. Lo cierto es que ahora esa “nueva clase” que se promovía desde el propio gobierno del estado queda desprotegida y suelta respecto a su futuro.

Y es que tras la muerte de Barbosa llegan las preguntas: ¿Quién tomará las riendas del ya fracturado partido morenista? ¿Las corcholatas tienen el respaldo del partido guinda, ahora que ya no está el mandatario?

¿Quiénes saltarán del barco? ¿El juego que acomodó durante este tiempo, opera en automático o topó con freno de mano?

¿Quién pondrá las nuevas reglas del juego?

¿Alguno de ellos tiene respaldo nacional Muchas incógnitas que deberán despejarse más tarde que pronto. Por el momento, la secretaria de Gobernación, Ana Lucía Hill, queda como encargada de despacho, en tanto el Congreso nombra a un nuevo mandatario para cumplir con el tiempo que queda hasta antes de las elecciones de 2024. ¿Será que una corcholata se “sacrifique” por el bien del barbosismo y pierda la oportunidad de competir en un par de años?

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Estará en Puebla el presidente Andrés Manuel López Obrador para los homenajes al gobernador Miguel Barbosa. Dicen los que saben que llegará para plantear una ruta de sucesión. ¿Qué personajes integran esa vía? Al parecer, ninguno de la llamada “nueva clase política”. En paz descanse, don Gobernador.

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Vecinas, vecinos, nos leemos mañana. Les dejo mi correo por si quieren chismear más a gusto: [email protected]

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