¡Vaya, vaya, vecinos, vecinas! Pero qué desbarajustes trae la clase política en Puebla. Mientras unos ven mensajes donde no los hay, otros no entienden los que sí existen. Ahí tienen ustedes los dos reveses legales que se fraguaron una vez que el gobernador Miguel Barbosa Huerta falleciera. Luego del control que ejerció sobre las instituciones, sometiéndolas y empleándolas como artefactos de presión, ahora empieza a salir el sol para varios de sus “tiro al blanco” favoritos. Miren ustedes que apenas ayer les dijimos que las denuncias contra una de sus consentidas y un voluntarioso -Olivia y Gabriel, respectivamente- seguía su curso en el Tribunal Electoral por actos anticipados de campaña y presunto desvío de recursos, cuando también me enteré que Abelardo Cuéllar Delgado, antiguo secretario del Trabajo de don Miguel, y a quien atacó hasta el cansancio los últimos meses, parece que ya la libró. Fíjense, el mismito Tribunal de Justicia Administrativa del Estado de Puebla dijo que no se ha determinado sanciones en su contra, por lo que la inhabilitación de un año para desempeñar empleos, cargos o comisiones en el servicio público que le impusieron, pues a la mera hora no se va a dar. ¿Por qué? Seguro se preguntarán ustedes. Simple y sencillamente porque los que acusaron no hicieron bien su chamba y no se respetó la presunción de inocencia, algo que era más que común escuchar en las conferencias matutinas del gobernador Barbosa. Ahora toca ver si, en revancha, Abelardo no los termina denunciando. Papitas calientes se quedaron en el sartén, ¿no creen?

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Bien por el gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina, luego que ayer en su visita al Sistema estatal DIF diera un jalón de orejas, indirecto pero muy directo, a quiénes han corrompido esta insititución de asistencia de pública con actos de corrupción, influyentismo, abusos de autoridad y malos tratos tanto al personal como a las y los usuarios. Además, hoy, en su mañanera, aseguró que ya se está investigando a las personas que están haciendo mal uso de los vehículos oficiales y de los recursos públicos como Cindy Jiménez Lozada, titular de la Unidad de Apoyo Ejecutivo, quien fue captada en la unidad 39 y con personal del organismo estatal con chofer llevándola de compras a una tienda de ropa íntima. Por lo pronto, las horas de Denisse Ortiz Pérez están contadas, pues en su haber ya carga una denuncia por los malos tratos contra menores de edad en las casas de asistencia y por 5 millones de pesos que no ha podido justificar en Unidad de Asistencia Social y Salud que tiene a su cargo. Estos y otros temas fueron tratatos el martes pasado, en un reunión a puerta cerrada con la presidenta honoraria del patronato Gaby Bonilla, la directora general Leonor Vargas Gallegos y el encargado de despacho del área médica de la Clínica de Especialidades Estomatológicas, donde constataron que desde hace dos años no cuenta con material de trabajo ni brinda servicios por falta de insumos, pese a que Ortiz Pérez presume en fotos falsas que todo va viento en popa. Cuestión de tiempo, pero parece que ahora sí el gobernador está dispuesto a poner orden.

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Vaya quemadota a nivel nacional que se llevó Puebla. Y es que si ustedes no supieron, o no se los quieren hacer saber, fíjense que en La Marañera del más cuatroteísta de los gansos, un reportero, aprovechando la sección de preguntas y respuestas, le dijo a AMLO que por qué no le daban una ayudadita al gobierno del estado dándole dinero para que el turismo se reactive. Además acusó que todo está abandonado y que casi casi la capital es un cuchitril con los túneles clausurados, la zona de Los Fuertes árida, la rueda de la fortuna inservible. ¡Vaya, pues! ¡Un desastre! Aunque el presidente supo salir del atolladero no se le vio muy contento que digamos, sobre todo porque él sabe que es verdad que en estos años la entidad vive estancada, no sólo en turismo sino en obras y desarrollo económico. Y que quede claro, no es hacer obras fastuosas como antes, sino obras con beneficio social. Seguramente la pregunta tampoco le cayó muy bien al gobernador Sergio Salomón Céspedes que ya se dio cuenta el lío que existe en el gobierno y no le queda otra que cantar la de “Cómplices, al rescate…”. Tras la pregunta más de un empresario sonrió. “Es hora de hacer acuerdos”, dijeron. Así que si en estos días vemos firmas de convenios ya sabemos de dónde proviene todo el asunto.

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También está el caso de Denisse Ortiz Pérez, titular de la Unidad de Asistencia Social y Salud, quien suele mentir sobre los trabajos y resultados que desde su área se generan. En días pasados presumió en sus redes sociales fotos falsas donde supuestamente, en 2022, en la Clínica de Especialidades Estomatológicas, ubicada en la 25 Poniente, habían atendido a 80 mil 850 personas, pero desde mediados de 2020 la clínica del DIF no cuenta con material de trabajo ni brinda los servicios que debería por falta de insumos. Esto, debido a que aseguran que Edgar Alexis Montero Carmona -recomendado de Denisse- hizo mal uso del material médico cuando fungió como director del área médica, acción que denunciaron en reiteras ocasiones a la propia Ortiz Pérez, quien optó por hacerse de la vista gorda. Así que a falta de evidencia, Denisse publicó fotos de gente que acudió a las jornadas que realizó su personal en Juntas Auxiliares, donde repartían despensas, paquetes de pañales para adultos y brindaban valoraciones médicas de salud bucal.

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Vecinas, vecinos, nos leemos mañana. Les dejo mi correo por si quieren chismear más a gusto: [email protected]