¡Vecinos y vecinas!

Oigan, pues vaya cachetada con guante blanco que sin querer queriendo, o con querer queriendo -según se quiera entender-, le acomodó la coalición Mejor Rumbo para Puebla a los morenistas.

¿Por qué lo digo?

Nada más y nada menos porque el equipo de Eduardo Rivera Pérez presentó como voceras a dos perfiles de mujeres: la exdiputada Nancy de la Sierra y la exsenadora Nadia Navarro, además del “Tigre” Humberto Aguilar.

¿Y dónde viene la cachetada?

¡Ah!

Pues que Morena inició este proceso electoral con el eslogan nacional de “es tiempo de mujeres” para cobijar a Claudia Sheinbaum Pardo, pero en Puebla los perfiles femeninos quedaron relegados y además exhibidos como de nula competitividad, pues según sus estudios demoscópicos sólo una mujer de las bases alcanzó cifras altas en el rubro.

Ahí están las encuestas.

Así es que Alejandro Armenta Mier se lleva como coordinador a Rodrigo Abdala, mientras que Pepe Chedraui a Gabriel Biestro para legitimarse ante los fundadores de Morena.

Y si a eso le sumamos que las tres candidaturas más importantes cayeron en hombres, gubenatura, senado y presidencia municipal capitalina, pues vaya que la paridad anda pero pariendo chayotes de tan olvidada que la tienen.

Punto para la inclusión en el equipo de opositor.

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Hablando de los súper asesores, hay quien dice que el llamado y la invitación a sumarse a los equipos de Armenta y de Chedraui obedece a ratificar la unidad, a validar la llamada “operación cicatriz” o, como dirían los vecinos cotorros, para “taparle el ojo al macho”.

¡Vaya trabajo y responsabilidad que tanto Abdala como Biestro tendrán!

Sobre todo, el impresentable de Biestro, quien cuenta con señalamientos y denuncias por manejar una red de bots al servicio del ahora llamado sicariato digital que servía para en su momento atacar opositores a los modos y formas del fallecido gobernador Miguel Barbosa Huerta.

La verdad es que en Morena varios vecinos chismosos me han confesado que si Biestro quiere tomar un lugar preponderante en la campaña, y posteriormente en el gabinete si es que su candidato logra triunfar, debe trabajar más como estratega que como porro; sacar la experiencia y no los puños.

Y, ahí, vecinos y vecinas, está lo más difícil, porque es ir contra natura.

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Con la novedad que en el partido Morena no hicieron encuestas para la designación de las candidaturas a diputados federales.

Así como lo lee, vecinos de la Comisión Nacional de Elecciones de Morena y de la dirigencia del Partido del Trabajo (PT) me cuentan que las candidaturas las sacaron por consenso de dos personajes que ya se posicionaron como lo líderes del partido en Puebla.

También estaba convocado el cooordinador legislativo Ignacio Mier Velazco, pero no se presentó y eso permitió que solo entre dos se definieran los espacios en la boleta para San Lázaro.

Entonces, si no hubo encuestas para las diputaciones federales, ahora se entiende por qué los movimientos y los cambios de última hora en las listas.

Y lo más grave… ¿Ustedes creen que habrá para las diputaciones locales?

Será de nuevo puro palomeo entre los alineados.

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Vecinas, vecinos, nos leemos mañana. Acuérdense que el que se enoja pierde. Les dejo mi correo por si quieren chismear más a gusto: [email protected]